El tranvía de Bilbao cumple en diciembre próximo dos décadas y tanto las máquinas que expiden billetes como las que sirven para pasar la Barik y validar el viaje que va a efectuar el viajero se han quedado ya obsoletas.

Por ello la dirección de Euskotren, la sociedad pública que gestiona el transporte ligero urbano, va a cambiar todos estos dispositivos ubicados en las marquesinas de las paradas tanto del tranvía de Bilbao como del de Gasteiz, aunque este último se inaugurara seis años más tarde, concretamente en 2008.

De momento, Euskotren ha sacado a concurso público el diseño de las nuevas máquinas automáticas de venta (MEAT), las que sustituirán a los actuales módulos metálicos rectangulares que ocupan toda la altura de la marquesina, y de las validadoras/canceladoras de billetes (CAN), la mayoría de ellas, los postes exentos ubicados en distintos puntos de las paradas.

El diseño de los nuevos aparatos se tendrá que integrar en la estructura de las actuales marquesinas, estas se van a mantener tal cual, por lo que en ningún momento su ubicación y formato podrán impedir el acceso a la información de cartelería que se ofrece para indicar la parada o el sentido del tranvía, así como la megafonía que avisa de posibles incidentes en el servicio.

El pliego de condiciones sugiere unas máquinas de venta de billetes que, con una forma trapezoidal, además alberguen otras funciones. Así se describe un dispositivo cuya cara más larga iría pegada a la marquesina y las otras dos laterales permitirían, en una de ellas, las operaciones de venta de tiques y recarga de tarjetas como la Barik u otras interoperables. En la segunda cara se ofrecería información del servicio y publicidad.

TODO TIPO DE PAGOS

Estas MEAT permitirían el pago en efectivo devolviendo cambio en monedas, además del abono del viaje con tarjetas de crédito y emitirían títulos con QR en papel. Lógicamente las nuevas canceladoras, además de admitir las actuales tarjetas interoperables implantadas en Bizkaia (Barik), Gipuzkoa (Mugi) y Araba (Bat), también atenderán todo tipo de documentos físicos y electrónicos, el mencionado título con QR, tarjetas bancarias o el pago con la app de móvil.

Las actuales 16 paradas del tranvía en Bilbao albergan 32 marquesinas y el estudio va a analizar su orientación y cómo les puede afectar a los dispositivos tanto la lluvia como el calor del sol intenso para tomar las soluciones necesarias.

Las especificaciones llegan al extremo de que se exige que las nuevas pantallas que se implanten funcionen correctamente si los dedos de los usuarios están mojados o, por efecto del viento, las gotas de lluvia alcancen los monitores.

También se evitarán los problemas de visualización por la incidencia de la luz del sol y las pantallas tendrán la posibilidad de dividirse en zonas para visualizar diferentes mensajes, si es necesario. En cuanto al sonido, los mensajes que se emitan deberán llegar a todas las personas que estén en la parada para lo que se hará un estudio sonoro de cada una de las marquesinas.

Otro tema que se va a tener en cuenta es que la ubicación de los nuevos postes donde se cancelen los viajes estén disponibles para todo tipo de usuarios, incluso los que tengan alguna discapacidad o usen sillas de ruedas y aunque la parada esté llena de pasajeros esperando el tranvía. Asímismo se tiene en cuenta a las usuarios con problemas de audición, por ejemplo, los mensajes en pantalla se subtitularán poniendo el mensaje en la parte superior de la pantalla para que la presencia de otros pasajeros por delante no impida acceder a la información.