La Policía Municipal de Bilbao ha precintado a última hora de la tarde de este jueves La Pérgola del Parque de Doña Casilda como medida preventiva y disuasoria para evitar que se produzcan botellones como ha ocurrido en las últimas semanas.

Precisamente no se ha querido esperar al fin de semana porque son las de los jueves una de las noches de la semana en la que más gente sale a disfrutar del ocio nocturno en la calle y cuando se han producido la mayor parte y las más numerosas concentraciones.

Así, se cierra esta zona del Parque de Doña Casilda de Bilbao durante las noche de jueves, viernes y sábados dentro del dispositivo preventivo para poner freno al botellón.

OCIO NOCTURNO

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ya señaló este pasado miércoles que se adoptarían medidas preventivas para asegurar una adecuada convivencia y advirtió de que los policías municipales serían implacables con las sanciones, tanto a los jóvenes que hacen botellón como a los establecimientos que distribuyan bebidas para el consumo en la calle y a quienes participen en las aglomeraciones.

El regidor bilbaino subrayó que se le hace "muy difícil e incomprensible ver alguna de las escenas" que se producen en los botellones. "El ocio no puede ser eso. No podemos vincular el ocio a beber sin sentido, a molestar a los vecinos o a la rotura de patrimonio público y privado", censuró. Y es que, tal y como insistió Aburto, "lo que no puede ser es que el ocio vaya aparejado a dejar la ciudad hecha un cisco, sucia, a romper cosas, molestar a los vecinos, actos vandálicos o beber sin sentido".

Así las cosas, el alcalde de la villa expresó que los agentes desplegados en este dispositivo especial, que desde esta noche ha procedido a precintar La Pérgola, trabajarán fundamentalmente en el plano preventivo, pero también en el coercitivo, el sancionador. "Una vez más, traslado el mensaje de que vamos a sancionar, y vamos a sancionar sin piedad", resumía Aburto. El primer edil consideró, no obstante, que la solución a estos hechos no puede ser únicamente policial.

Por eso, la primera respuesta de los equipos y patrullas debe ser preventiva para "intentar anticiparse" e ir "ocupando el espacio" donde tienen lugar los botellones con más frecuencia, pero también debe haber una actuación "contundente" llegado el caso.

La presencia policial será "muy importante en las zonas más concurridas de los denominados botellones", aunque según reconoció, "no es lo mismo lo que ocurre en Doña Casilda que lo que ocurre en Pozas".

Se están cobrando

"Vamos a sancionar a los establecimientos hosteleros que distribuyan bebidas para el consumo en la calle mientras eso no sea posible y vamos a sancionar a aquellas personas que estén participando en estas aglomeraciones", zanjó Aburto. La Policía Municipal ha impuesto más de 2.200 sanciones desde julio de 2020. "Vamos a actuar con firmeza y que nadie se sorprenda a posteriori", manifestó.

En este sentido, avisó de que "si alguien piensa que esto se va a solucionar solo con la policía" y es cuestión del alcalde o del Ayuntamiento, "está equivocado" porque "afecta a todos". Hace unos días, Aburto detallaba que desde el comienzo de la pandemia han sido impuestas 2.500 sanciones por botellón, cuando anteriormente eran una media de 300 al año.

"Se están cobrando. Recibo cartas de padres y madres pidiendo que las sanciones sean de trabajos para la comunidad", comentó el alcalde. En cualquier caso, Aburto subrayó que no pretende "criminalizar a los jóvenes" porque "hay miles que todos los fines de semana salen en una situación de normalidad".