BILBAO. La plataforma contraria a la ampliación de la Variante Sur Metropolitana de Bilbao, conocida como Supersur, ha convocado una manifestación para el próximo 29 de febrero en la capital vizcaina con el fin de reclamar la "paralización cautelar de las obras" por su "severa" amenaza al área natural de Bolintxu.

La Diputación de Bizkaia inició en enero de 2019 las obras para unir la Supersur con la autopista AP-68 en Venta Alta (Arrigorriaga), una conexión de algo más de 4 kilómetros que supondrá una inversión de casi 180 millones de euros y que estará operativa en 2023.

La plataforma "Ampliación Supersur Ez", que ya se manifestó el pasado año en contra del proyecto, ha anunciado en un comunicado que el próximo 29 de febrero volverá a salir a las calles de Bilbao para reclamar la paralización de las obras con el fin de "salvaguardar el valle de Bolintxu" y para "denunciar la actuación" de la Diputación de Bizkaia con estros trabajos.

El colectivo ha recordado que denunció ante los tribunales que la Declaración del Impacto Ambiental (DIA) del proyecto caducó en 2017, por lo que se pidió la paralización cautelar del proyecto hasta que se emita una sentencia judicial. "Sin embargo, las obras siguen. En un breve espacio de tiempo nos podemos encontrar con un proceso irreversible", ha criticado la plataforma.

Tras señalar que la Supersur, que costó inicialmente 821 millones de euros, ha resultado un "fiasco" por su baja utilización por parte de los conductores, la plataforma ha asegurado que "las obras han dejado un saldo de 15 hectáreas de bosque destruidas en el entorno de Seberetxe, incluidos varios hábitat de Interés Comunitario".

"De seguir ese camino llegará al valle de Bolintxu, la joya del macizo del Pagasarri", un enclave que está "reconocido en el Plan Especial del Pagasarri como la zona de mayor riqueza en valores naturales del municipio bilbaíno y la propia Diputación lo considera un espacio a preservar por su alto interés en términos de biodiversidad".

La Diputación pretende salvar la vaguada de Bolintxu mediante un viaducto sin pilares, aunque la plataforma ha asegurado que, pese a que el Gobierno foral consideró que la afección de las obras en este área natural sería poco relevante, la repercusión será "severa".

"Incluso tras la aplicación de medidas correctoras, la afección sobre las aguas del arroyo Bolintxu, sobre la red de drenaje del valle, sobre su flora y la fauna protegida y amenazada será severa, y habrá un gran aumento de la contaminación acústica y lumínica", según la plataforma.