Galdakao - Unai Insausti lo tuvo claro desde muy pequeño: “Quería ser guitarrista”. Y tras mucho trabajo y tesón lo ha conseguido. En estos momentos vive de la música, en concreto de la guitarra y combina su faceta como concertista, “ofreciendo conciertos tanto en España como en otros países, con la labor pedagógica”. En este sentido ha sido profesor tanto en conservatorios como en escuelas de música. Entre otras, en Máximo Moreno de Galdakao, donde suele dar clases y así lo ha hecho durante varios años, en periodos alternos. A este joven músico le sale la vena artística en cada nota, y su valía con la guitarra le ha valido, entre otros reconocimientos y mucha satisfacción, varios premios.

Han sido además reconocimientos internacionales, como el primer premio obtenido en el concurso internacional de guitarra Admira de Zarautz, el segundo premio en el concurso internacional Andrés Segovia de Linares, los dos terceros en el Sinaia en Rumanía o el premio a mejor intérprete de música andaluza en el concurso internacional de guitarra Comarca del Condado, en Jaén. Recientemente ha ofrecido un concierto solidario en la iglesia de Santa María de Galdakao, organizado por la Unidad Pastoral de la localidad y el Área de Cultura del Ayuntamiento de Galdakao, y que sirvió para ayudar a la construcción de un colegio en Mozambique. “Sería bonito hacer más conciertos de este tipo”, comenta, si bien ha actuado varias veces en centros de día y residencias.

A sus 32 años, Insausti recuerda que “desde pequeño me ha gustado la música, pero sobre todo lo que me gustaba era la guitarra”. Y es que “desde que tengo recuerdo con apenas 5 años, siempre decía que quería ser guitarrista en casa y siempre ha sido mi ilusión, estudiar guitarra y dedicarme a ello profesionalmente”. En este sentido, comenzó a estudiar música a los 7 años, iniciándose “con el estudio de la guitarra a los 8 años” y cursando después toda la carrera profesional. Catorce años de conservatorio y luego todos los estudios de máster y posgrado. Llegar hasta donde está no ha sido sencillo, y detrás hay infinidad de horas de trabajo y ensayos.

Para formarse estudió el grado superior en Musikene y “luego cursé estudios de posgrado y máster en Alemania, en la International Guitar Academy, en Koblenz”, indica. Más tarde se formó en Italia en el Conservatorio de Avelino y la Segovia International Guitar Academy de Pordenone. “También he hecho un máster de interpretación en la Universidad Alfonso X el sabio en Madrid y un Máster en Pedagogía en la Complutense de Madrid”, apunta.

Asimismo ha asistido a numerosos cursos de perfeccionamiento y masterclasses con prestigiosos maestros y guitarristas de todo el mundo, lo cual ha supuesto un plus dentro de su formación. Además de la guitarra, “durante algunos años estudié piano porque era obligatorio estudiarlo como instrumento complementario en el conservatorio”, pero nunca se ha separado por nada de lo que realmente le gusta, la guitarra clásica. En este sentido, el tipo de música que más toca es “música clásica, que abarca muchos estilos, desde el barroco hasta música del siglo XXI”; explica.

Según Insausti, “la guitarra es un instrumento que para este tipo de música tiene su dificultad, ya que es un instrumento polifónico y solista y que tiene algunas limitaciones musicales”. En cuanto a sus gustos, “la obra a la que más cariño le tengo es el Concierto de Aranjuez, de Joaquín Rodrigo, para guitarra y orquesta. Lo he escuchado millones de veces desde pequeño y he tenido la suerte de interpretarlo varias veces”. No obstante, escucha muchos géneros musicales y “me cuesta elegir, ya que escucho mucha música clásica, me encanta el rock...”. Para Insausti la música es mucho más que un medio de vida, y la ve como un modo de “comunicarte directamente con la gente a través de un lenguaje universal que transmite sentimientos directamente ”.