Ahotsak cumple 35 años cantando desde Sodupe
El quinteto mantiene como seña identidad sus temas de estilo “atemporal”
Ahotsak puso el broche de oro al año de su 35º aniversario en contacto con los vecinos y vecinas de Sodupe y compartiendo su visión “atemporal” de la música en la tradicional misa de Nochebuena en la iglesia de San Vicente Mártir con novedades en su repertorio.
Prepararon “Gau erdian soinua, de los guipuzcoanos Miguel Mari Azpiazu y Luis Iriondo, la primera canción en euskera que ganó en 1971 el festival nacional de villancicos nuevos de Iruña interpretada por Unai Hirukoa, pertenecientes al movimiento la nueva canción vasca como los azkoitiarrak Kontrapuntoak y otros grupos de la época que generaron una gran riqueza en el panorama musical de Euskal Herria”, dentro de su “labor de recuperación y mantenimiento del folklore vasco”, explican Arturo y María Jesús Baranda, Bingene Terreros, Jessica Cano y Alberto Irazabal, componentes de la actual formación.
“Incansables” en sus ensayos de los sábados en la kultur etxea de Sodupe, conciben sus canciones como “forma de sentir” entre “las tendencias que afloran actualmente en el mundo artístico, desde el reggaeton, trap, música electro-latina...” porque consideran que “las buenas canciones nunca pasarán de moda”.
Lo han vivido desde la infancia y hasta el día de hoy, ya que las tías de María Jesús y Arturo cantaban zarzuela; los aitas de Alberto, en varias corales; la hermana de Bingene dirige coros y el padre de Jessica tocaba el acordeón.
Seis discos jalonan su trayectoria: el primero, homónimo (1996), Desde siempre Navidad (1997), En la próxima estación (2006), No se mueve la ciudad (2014), Ahotsak y la música, 25 años juntos (2016) y El invierno junto al sol (2024). Con el denominador común de “cierta coherencia; un género que resiste al paso del tiempo, ya que cantar a voces reviste cierta complejidad, no es lo mismo que a unísono, a través de la composición y creación tu mundo interior se desarrolla hasta límites insospechados” entendiendo la música como “lenguaje universal, espacio de libertad y un bálsamo; el arte en sí es una forma de expresión, es autónomo.”
Canción protesta
Una de sus señas de identidad es la canción protesta, movidos por “las necesidades y costumbres de los pueblos”. Por ese motivo, Alberto viste en la fotografía una camisola de artesanía palestina bordada a mano visibilizando el genocidio. y la barbarie que están padeciendo. También forma parte del atuendo la antigua bandolera nicaragüense que Jessica trajo de su país, denunciando “la dictadura y opresión que padecen tantos países Latinoamérica”.
Entre sus proyectos de futuro, además de llegar a componer un tema “en la línea de Imagine de John Lennon o El himno de la alegría de Miguel Ríos, versión de la novena”, a corto plazo volverán al festival de folklores de Santoña en julio de 2026.
Discos
6
“Las buenas canciones no pasarán de moda”, aseguran Arturo y María Jesús Baranda (conformaron el mítico grupo Hermanos Baranda junto al recordado Emilio) Bingene Terreros, Jessica Cano y Alberto Irazabal. Han publicado seis discos: ‘Ahotsak’ (1996), ‘Desde siempre Navidad’ (1997), ‘En la próxima estación’ (2006), ‘No se mueve la ciudad’ (2014) ‘Ahotsak y la música, 25 años juntos’ (2016) y ‘El invierno junto al sol’ (2024)