Denuncian la "precaria situación de un perro encadenado" en Aulesti
La asociación animalista Haiekin solicita al Consistorio la intervención urgente del animal
La asociación animalista Haiekin ha interpuesto una denuncia tras constatar "la precaria situación" de un perro de raza pastor alemán que está encadenado en Aulesti y ha solicitado al Consistorio "la intervención urgente del animal y su traslado a un centro de acogida para que un veterinario pueda evaluar su estado de salud".
Según el comunicado emitido por Haiekin, tras recibir un vídeo de un perro de raza pastor alemán en "malas condiciones, atado a una cadena y pegado a una caseta, con la punta de las orejas con heridas y cortes, rodeado de moscas y un estado de higiene pésimo, tanto suyo como a su alrededor", este lunes, día 18 de agosto, una integrante de la asociación, "acompañada por una patrulla de la Ertzaintza", se personó donde se encontraba el animal.
Tal y como denuncia la asociación animalista el perro "vive en unas condiciones lamentables; la caseta es un espacio pequeño e insalubre, con signos de hongos y humedad, muestra graves daños estructurales, con partes rotas y grietas, lo que representaba un riesgo para la seguridad del animal". Según exponen desde Haiekin, durante la intervención, el titular afirmó tener en su posesión "otros nueve perros de caza en óptimas condiciones, pero se negó de forma categórica a mostrarlos a los agentes, alegando que se encontraban en una finca privada".
Ley vasca
Por este motivo, la asociación ha solicitado una inspección inmediata de los otros animales, ante la sospecha de que puedan estar en condiciones similares o desaparecer. En este sentido, Haiekin subraya que "un perro no es un objeto ni una alarma, sino un ser vivo que siente y sufre".
Por ello, la denuncia presentada "busca no solo proteger a este animal, sino también reforzar la obligatoriedad de cumplir la ley y la responsabilidad de los responsables, y que esta práctica de cruel maltrato deje de estar normalizada", ya que, tal y como recuerdan, la Ley vasca prohíbe explícitamente el encadenamiento de perros, "calificando esta acción como una infracción grave y sancionada con multas de 3.001 a 10.000 euros".