Una información correcta y lo más actualizada posible está al mismo nivel que otra de las reivindicaciones de Fekoor en materia de ocio y turismo inclusivo: la formación y la empatía de las personas encargadas de gestionar recursos y espacios para así poder dar una respuesta correcta al público. Y eso supone comprender sus necesidades.
¿La pandemia ha servido para que instituciones y administraciones sean más sensibles con el tema de la accesibilidad universal?
Más creo que ha sido resultado de la pandemia y de que la mirada hacia el turismo está cobrando mucha relevancia. Debido a todo esto, desde la Diputación se está intentado hacer un esfuerzo para mejorar el turismo desde un punto de vista más inclusivo.
¿Las instituciones esperan a que ustedes planteen iniciativas?
Nosotros somos conscientes de la realidad que vive el colectivo, de sus necesidades, de la falta de recursos en ciertos momentos y de la falta de empatía en otros, que esto también es importante. Estamos en un grupo de trabajo con la Diputación. Y cada entidad o institución que se pone en contacto con nosotros intentamos darles nuestros consejos sobre accesibilidad. Y también la Diputación tiene una página web [https://accesible.visitbiscay.eus/es/] donde hay un montón de recursos. Es un buen punto de inicio, pero falta feedback.
¿Qué consideran más necesario: más apoyos técnicos o humanos?
Lo fundamental es que exista accesibilidad. Si un recurso no está bien diseñado… Si el ascensor no está preparado más que para una silla de ruedas, pues la actividad se prolongará. En Fekoor solemos dinamizar grupos con 10 sillas de ruedas y unas 25 personas, aproximadamente… Creo que desde ese prisma de la accesibilidad universal deberíamos pensar que todas las personas podríamos tener un problema de movilidad en nuestra vida al que dar respuesta. Uno de los handicaps que encontramos es que se están haciendo accesibles diferentes recursos, pero depende de qué colectivos y número de personas pues tenemos problemas, a pesar de que ese recurso sea accesible. Así que los apoyos técnicos son fundamentales.
¿Y los humanos?
Los humanos también. Encontramos falta de empatía y de formación en personas que gestionan esos recursos. No es generalizado, pero es fundamental que quienes sean responsables de esos recursos sean personas que estén convenientemente formadas y tengan cierta sensibilidad especial hacia la diversidad en general.
¿Está tardando en llegar esa igualdad de oportunidades en forma de accesibilidad universal?
La sensación es que cada vez hay más sillas de ruedas y más diversidad en la calle. Eso cualquiera lo puede observar en el día a día. Y eso implica que algo se está haciendo bien en el entorno y hay que seguir en ese empeño para que cualquier persona, independientemente de sus problemas de movilidad y discapacidad pueda acceder a recursos de ocio y turísticos en igualdad de oportunidades. También es verdad que la igualdad de oportunidades enfrenta muchas miradas y es importante aunarlas todas y que cada uno no hagamos la pelea por nuestra parte. Vamos avanzando, pero hay que seguir trabajando conciencias y sensibilidades, y no dejar atrás a nadie. Entender como sociedad que la diversidad es algo que suma e incluso multiplica. Nunca resta.
El ocio accesible ¿es la gran asignatura pendiente?
Sigue siéndolo a día de hoy. Y no hemos hablado del transporte, pero es fundamental para personas con movilidad reducida. Para Fekoor sigue siendo una de nuestras prioridades, para que no se olvide; y ponerlo sobre la mesa cuando podamos, donde podamos y que se nos escuche y se nos tenga en cuenta.
¿Alguna propuesta para las instituciones?
No tengo claro de quién será la competencia final, pero las oficinas de información turística deberían mejorar e incluir información útil relacionada con la accesibilidad. Y formación suficiente como para entender cuáles son las necesidades del colectivo y ser capaces de dar la información necesaria para generar la mejor experiencia de ocio y turismo posible en nuestro territorio. Ese sería el reto que dejo ahí…
¿Y alguna queja o sugerencia de personas usuarias y/o familiares?
Tenemos la sensación de que las condiciones de accesibilidad han podido empeorar durante estos años en algunos recursos. El caso más recurrente que hemos recabado ha sido el de Pozalagua. El acceso se hace a través de un salvaescaleras y nos han trasladado que suele estar estropeado. Somos conscientes de que es un entorno natural y no accesible al 100%, pero sí que se había generado un itinerario interior en el que se podía ver buena parte de las cuevas con varias personas con problemas de movilidad como hicimos hace tiempo…