El centro EtxeTIC de Mungia atiende a 54 hogares de nueve municipios

El hogar es un refugio para muchas personas mayores o con discapacidad. De fomentar esa permanencia, pero al mismo tiempo mejorar la calidad de vida se encargan los centros forales etxeTIC, que atienden a cerca de 2.000 personas.

El último, el de Mungia, que se presentó oficialmente el viernes pasado viernes con una jornada de puertas abiertas que contó con la visita de la diputada de Acción Social, Amaia Antxustegi, y la alcaldesa de Mungia, Alaitz Erkoreka, junto con alcaldes y alcaldesas de los municipios de Mungialdea.

Da servicio a Arrieta, Bakio, Fruiz, Gamiz-Fika, Gatika, Laukiz, Maruri-Jatabe, Meñaka y Mungia. En la actualidad, 54 personas en situación de dependencia y sus personas cuidadoras se benefician de este servicio en Mungialdea. Su implantación se está coordinando con los servicios sociales de base municipales y entidades locales para garantizar la máxima cobertura. En total, se prevé llegar a 414 personas potenciales usuarias de los nueve municipios que conforman el área de influencia del centro.

Del medio centenar de hogares dados de alta en el servicio, 42 son hogares definidos como tecnológicos, es decir, aquellos que se desenvuelven sin dificultad con las tecnologías y manejan bien las tablets utilizadas para el seguimiento y la conexión con su coordinador/a de caso. También hay 12 hogares analógicos, en los que los seguimientos se realizan telefónicamente. Asimismo, en 13 de los hogares atendidos, la persona en situación de dependencia es menor de edad.

En este sentido, el Ayuntamiento de Mungia puso a disposición de la Diputación un local municipal para hacer posible la apertura de este centro. “Este centro supone dar un paso adelante para acercar los servicios a la ciudadanía y mejorar la atención y su calidad de vida. Nuestra prioridad es poner a las personas en el centro de nuestras políticas”, apunta la alcaldesa de Mungia, Alaitz Erkoreka.

En etxeTIC Mungia, la Diputación ofrece el servicio público de apoyo a los cuidados de larga duración en el hogar dirigido a personas en situación de dependencia y/o discapacidad, independientemente de su edad, así como a sus personas cuidadoras, fundamentalmente familiares. Este modelo combina la atención presencial con el uso de tecnología avanzada, adaptándose a las necesidades de cada hogar. Servicio personalizado que incluye seguimiento a través de tablets en los hogares tecnológicos y contacto telefónico en aquellos de carácter analógico.

“Hay talleres presenciales de estimulación cognitiva, creativa y de relajación y de apoyo para cuidadores”, explica Aroa Murillo, psicóloga. Tania Golpe, una de las terapeutas ocupacionales, señala que todavía “los talleres son incipientes” y están escuchando “las demandas”. Actividades que permiten que las familias “tengan su espacio”.

Respiro a cuidadores

Una de esas personas es Mónica Gómez, vecina de Mungia.  “Mi hijo viene los lunes a pintura, los martes a estimulación cognitiva, y los miércoles yo voy a relajación y los viernes a gimnasia con ejercicios para prevenir caídas. Estamos encantados, nos da un respiro tanto físico como mental”. A sus 85 años, Carlos Ortiz, vecino de Mungia, no falta a su cita todos los viernes.. “Vengo y hago todos los ejercicios físicos que me mandan. Estoy más joven que cuando tenía 18 años”, bromea. Incluso, se está formando en nuevas tecnologías. “Mi aita tiene una tablet que está aprendiendo a usar y las nietas también le ayudan. La verdad es que este centro es una gran iniciativa”, concluye Irene Ortiz.