La oficina de turismo de Gernika-Lumo está de estreno después de renovar su imagen con una reforma sostenible que cuenta, además, con numerosos elementos del patrimonio gernikarra.
Han pasado treinta y seis años desde que la oficina de turismo de Gernika-Lumo abriera sus puertas en la céntrica calle Andra Mari, y ahora luce una nueva imagen, tras la renovación llevada a cabo por el Ayuntamiento que conjuga sostenibilidad, diseño contemporáneo y recuperación patrimonial.
La intervención ha modernizado el sistema eléctrico, sustituido las luminarias por soluciones más eficientes y actualizado el mobiliario y la pintura interior. Y se ha mejorado la acústica con la utilización de textiles fonoabsorbentes tanto en los paneles como en el nuevo mobiliario. La zona del mostrador incorpora también acabados en madera y tejidos diseñados para suavizar el ambiente sonoro. Sin embargo, el proyecto va más allá puesto que se trata de una reforma que apuesta por el confort acústico, la eficiencia energética y sobre todo el respeto al pasado.
Una renovación llena de simbología que recupera el patrimonio
Además de la sostenibilidad esta reforma destaca por la inclusión en ella de diversos elementos con carga simbólica recuperando elementos históricos del edificio, antigua capilla del colegio Sagrado Corazón.
Uno de los elementos más destacados es el falso techo decorativo del vestíbulo, que no solo mejora la acústica del espacio, sino que actúa como base para una nueva iluminación ambiental. Justo en la entrada, un panel retroiluminado de gran formato, cuyas medidas son 2,5 metros de alto por 1,5 de ancho, muestra la imagen del Árbol de Gernika, símbolo identitario de la villa. A sus pies, se mantiene la pila de agua bendita original, vestigio de la antigua capilla del colegio Sagrado Corazón, que ocupaba este edificio tras la Guerra Civil.
La concejala de Turismo, Nerea Revuelta, destaca el valor simbólico del proyecto “queríamos que la oficina reflejase el alma del municipio, un lugar donde la historia y la innovación conviven. Esta intervención mejora el confort de quienes nos visitan, reduce nuestro consumo energético y pone en valor un edificio con mucha carga simbólica.”
La bóveda original de la antigua capilla también ha sido realzada con iluminación específica para destacar su forma. En la pared trasera del mostrador, otro panel retroiluminado de gran formato, de 7,5 metros por 1,3, expone imágenes de gran calidad de otros enclaves emblemáticos de la localidad, como los refugios antiaéreos de Astra, el Pasealeku, el mural del ‘Guernica’ o el parque de los Pueblos de Europa.
Las obras de mejora no solo se han realizado en el interior, ya que, en el exterior, se han mejorado la fachada y los soportales de las calles Artekale y Andra Mari, reforzando el carácter acogedor y ordenado del entorno urbano.
Más de 1,5 millones de personas
Más de 1,5 millones de personas han pasado por esta oficina desde su apertura en 1989. Con esta reforma, se pretende consolidarla como punto de información, y carta de presentación de una villa que apuesta por la sostenibilidad sin renunciar a su memoria.