El boom de los coches eléctricos, una apuesta medioambiental que apoyan todas las instituciones, tiene todavía algunos claro oscuros fruto de su proliferación reciente en el mercado. La manera de solventar siniestros como puede ocurrir con un incendio es uno de los aspectos para los que los bomberos ya se están preparando y que por su parte las compañías de seguros contemplan a la hora de validar las pólizas. Sin embargo, la otra cara de este asunto la aportan los concesionarios que lejos de ver peligros en estos coches ponen en valor los controles de seguridad. “De los miles de vehículos vendidos desde hace 40 años, no hemos tenido que lamentar ningún siniestro de estas características”, confiesa Txus González, gerente del Grupo Meuri.
Sin siniestros en Bizkaia
Aunque en Bizkaia no se ha dado todavía ningún siniestro por estas causas el incendio de un coche híbrido en la localidad guipuzcoana de Zumarraga la pasada semana con una víctima mortal y la muerte de dos bomberos y diez intoxicados ayer en un parking en Madrid han vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de adoptar medidas para afrontar estos casos. Estos últimos incidentes han despertado preocupación tanto en las compañías de seguros, como en los garajes comunitarios.
“Cada vez hay más vehículos eléctricos y la forma de apagar los incendios es diferente”. Las declaraciones de la concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Bilbao, Amaia Arregi, hace una semana confirmar el empeño del Área por estar preparados ante nuevas eventualidades.
Según apunta una empresa experta en extinción de incendios aunque “los vehículos eléctricos son generalmente seguros, las baterías de litio que alimentan a estos coches presentan retos adicionales en comparación con los vehículos de combustibles tradicionales”. En garajes comunitarios, –donde cada vez proliferan más estos vehículos– la opción de que se genere un incendio es una preocupación cada vez mayor. Y es que, tal y como apuntan expertos, las baterías de litio pueden generar calor y, en circunstancias extremas, experimentar un fenómeno conocido como fuga térmica, donde el calor generado por la batería puede resultar difícil de controlar.
Seguridad extrema en talleres
Txus González explica al respecto que “la seguridad de sus talleres es extrema”. De hecho asegura que los mecánicos que se encargan de inspeccionar o reparar cualquier avería que se produzca en los vehículos eléctricos o híbridos reciben una formación especial”. Asegura que “se nos exigen una formación exhaustiva”. No cualquier mecánico puede ponerse a manipular un coche eléctrico o híbrido en “uno de nuestros talleres”, aclara Txus González. Además, el gerente del Grupo Meuri hace hincapié en que “tanto la formación como la precaución son obligados a la hora de manipular estos vehículos”.
Ante la creciente presencia de coches eléctricos en garajes comunitarios, es esencial implementar protocolos de seguridad sólidos. Esto incluye la instalación de sistemas de detención de humo y calor que puedan identificar rápidamente cualquier anomalía. Estos sistemas pueden ser detectores de humo fotoeléctricos, detectores de humo convencionales ópticos, detectores de humo convencionales iónicos.
De hecho, la concejala ya desvelaba que los Bomberos de Bilbao ya han recibido una formación específica para intervenir con una formación específica ante estos incendios a través de un curso de intervención frente al riesgo eléctrico.
Falta de legislación
Las comunidades de propietarios con aparcamientos comunitarios también se han hecho eco de la falta de una legislación como tal a la hora de instalar los cargadores. El presidente de la comunidad de garajes en Capuchinos, Xabier, aclara que “a la comunidad no se le obliga a cumplir ningún tipo de requisitos siempre que el consumo no detraiga del consumo general y por tanto el coste no repercuta”. Añade en este sentido que solo tienen la obligación de informar. A partir de ahí el usuario particular es el que tendrá que contratar al instalador autorizado para que se cumplan las reglas.
El presidente de esta comunidad señala que precisamente “hace poco hicimos una visita con un perito y nos manifestaron la preocupación de los seguros porque consideran que el tema de los incendios es una riesgo añadido”.
Apuntaba a su vez, que al ser algo relativamente reciente, los seguros creen que la legislación va por detrás de las casuísticas reales que se pueden presentar. Sin embargo, se trata de una tendencia que en pocos años irá reemplazando al vehículo tradicional en una apuesta por una calidad medioambiental.
17.000 plazas de parking con enchufe
De hecho, el Ayuntamiento de Bilbao tiene previsto para este 2025 el 10% de las 17.000 plazas de parking tengan enchufe para coches eléctricas. Torres Quevedo ha sido de hecho el primer parking de residentes que se ha electrifico en Bilbao. El propio director de Movilidad y Sostenibilidad, Ignacio Alday, está convencido de que “la demanda de estas parcelas en los residentes ya empieza a ser habitual”, aunque admite que no se les ha dado una respuesta conjunta.