Bilbao River Company, la propia Ría como medio de comunicación
Gabino Gorostiza, su director general, explica los retos de la compañía
Bilbao River Company cuenta ahora con un pantalán en el centro de Bilbao y dos embarcaciones destinadas a recorridos turísticos y de ocio, una de ellas 100% eléctrica. Pero cuenta con 16 concesiones para otros tantos pantalanes en ambos márgenes desde la ciudad hasta la desembocadura. La empresa imagina un futuro habitado por ribereños y ribereñas que cruzan de un lado a otro no solo por ocio sino también para sus actividades cotidianas.
Según su presidente, Gabino Gorostiza, “Bilbao River Company nació hace un par de años dentro de un proyecto destinado a generar tráfico, movimiento, relacionado con ocio y turismo en la Ría”. Su primer paso ha sido montar un pantalán en Bilbao, frente al Hotel Consulado de Bilbao. Desde ahí dan servicio a dos embarcaciones que navegan por la Ría. Una de ellas, el EkoKaT, es un catamarán que funciona gracias a sus 24 placas fotovoltaicas y dos pequeños aerogeneradores. Con sus 15,5 metros de eslora y 4,6 de manga es la primera embarcación eléctrica, y por tanto completamente silenciosa, que navega por la Ría.
“Hemos conseguido una serie de concesiones de la Autoridad Portuaria y Demarcación de Costas para un total de 16 pantalanes distribuidos desde la desembocadura de la Ría hasta Bilbao, pasando por Santurtzi, Getxo, Portugalete o Barakaldo” detalla Gorostiza.
Futuro
Bilbao River Company espera despertar el espíritu ribereño de las 800.000 personas que viven en ambos márgenes de la Ría y que, en un futuro próximo, su lámina de agua sirva no solo para el ocio y el turismo sino también como medio de comunicación cotidiana.“Históricamente, la gente iba de una ribera a otra para ir a trabajar. Los antiguos botes cruzaban prácticamente en perpendicular; nuestro proyecto contempla un cruce más transversal. Pensamos en una especie de cremallera que vaya uniendo las dos riberas”, explica el presidente de Bilbao River Company.
“Pretendemos dar a Ría la vida que tienen los cauces de agua en otras ciudades europeas y de medio mundo. La Ría es un medio de comunicación. Ahora, con los bidegorris, en bicicleta o a pie, las riberas se ha convertido en paseos llanos por donde se circula y o se puede ir a descansar, para pasar el rato, a hacer deporte o a pasear. Queremos contribuir a que las personas disfruten de esos espacios”, dice Gorostiza.
Las rampas de acceso a las embarcaciones desde sus pantalanes serán muy tendidas y se podrá acceder con cochecitos de bebé, carros y mascotas. “La ría une las dos riberas. Y lo que ha sido un corte volverá a ser una zona amable por donde la gente pasea, cruza de un lado a otro y va desde Santurtzi a la playa en un barquito que te deja en la misma arena en apenas cinco minutos o pueda pasar desde Erandio a Portugalete a tomar el aperitivo en solo diez minutos”, concluye el emprendedor.