Las fuertes lluvias que han caído en Bizkaia en las últimas horas han provocado varios desbordamientos en los ríos a su paso por Güeñes. La abundancia de agua en los ríos Kadagua y Herrerías ha provocado su desbordamiento en varias zonas de la localidad vizcaina.
El Ayuntamiento ha activado esta mañana el plan de plan de emergencia municipal por riesgo de inundaciones debido al temporal de lluvias intensas y granizo. Sobre las 12.00 horas las incidencias se están registrando en la calle Askatasuna y en el camino de Urkamendi de La Quadra; en Sodupe el agua ha obligado a cerrar en ambos sentidos el camino de Ubide así como el acceso a Elubarri a Allende Zelaia y a Ribera de Iordi que están cerrados.
En Güeñes, el camino de Sologutxi a Lambarri también se han visto afectado al igual que la calle Eretza de Zaramillo que permanece cortada en ambos sentidos.
La lluvia da paso a la nieve
La lluvia y el viento darán paso en las próximas horas a la nieve. El Departamento de Seguridad ha extendido el aviso amarillo por nieve hasta el martes, cuando se espera que la cota se sitúe entre los 600 y 800 metros.
Se prevén para ese día entre las 00.00 y las 18.00 horas chubascos débiles, localmente moderados, especialmente en la vertiente cantábrica, en el oeste y durante la primera mitad del día. En cuanto al espesor, podría ser de entre cero y cinco centímetros a 1.000 metros.
También está operativo para ese día otro aviso amarillo por riesgo de temperaturas mínimas y de heladas entre las 18.00 y las 24.00 horas.
Seguridad ha desactivado este lunes la alerta naranja por riesgo de precipitaciones, aunque mantiene hasta las 18.00 horas el aviso amarillo por lluvias ya que se pueden acumular entre 10 y 30 litros por metro cuadrado en la vertiente cantábrica y hasta los 25 litros por metro cuadrado en la zona de transición.
Carretera cortada
La carretera GI-638 entre las localidades de Mutriku y Ondarroa permanece cortada por desprendimiento de rocas y árboles, mientras que la N-634, a su paso por la localidad guipuzcoana de Getaria, se ha abierto al tráfico tras solucionarse los problemas por riesgo de caída de piedras y tierra, según ha informado el Departamento de Seguridad. La GI-838 se ha cortado en todos los sentidos, en ese tramo, por la caída de rocas y árboles sobre la calzada y se trabaja en la zona para despejar la calzada.