En imágenes: Ispaster, museo vivo del caserío
6
Erkiagabekoa, Aixeder, Goikoa o Batiz son algunos de los edificios que podemos admirar en Ispaster, localidad ubicada en la comarca de Lea Artibai, y que alberga uno de los caseríos más antiguos conservado en Euskadi, originario de finales del siglo XV.
En los últimos años se han realizado diversos estudios sobre el origen del caserío vasco y su evolución, lo que ha permitido interpretar sus diferentes aspectos, así como los usos y las costumbres de sus habitantes, algo que en Ispaster podemos ver in situ, a través del recorrido que se llevó a cabo organizado por el Ayuntamiento de Ispaster en el marco de las Jornadas europeas de patrimonio –coordinadas por la Diputación Foral de Bizkaia– y dedicadas este año a los caminos, redes y conexiones.
Así, el pasado fin de semana más de un centenar de personas pudieron disfrutar y conocer la historia del caserío vasco en un itinerario de diez paradas que permite aprender sobre la evolución del caserío vasco desde finales del siglo XV hasta nuestros días. El caserío Erkiagabekoa, el molino de Aixeder o el caserío-palacio renacentista Urkixa y el palacio barroco Arana fueron algunas de las paradas más señaladas de este espectacular recorrido.
Sin duda, el caserío más destacado de la ruta es Erkiagabekoa, uno de los baserris más antiguos conservados en Euskadi. Originario de finales del siglo XV, mantiene la estructura original de la Edad de Oro del caserío vasco. Cuenta con un robusto muro de cerramiento de aparejo gótico, al que en el siglo XVIII se añadió un cuerpo de edificación lateral. Continuando con el recorrido encontramos las personas asistentes se encontraron con Aixeder, uno de los pocos molinos de viento que se conservan en Bizkaia. Situado en la cima de la colina de San Martín, en el barrio de Soluanes de Ispaster, y expuesto a los vientos procedentes del mar, domina el valle central de esta localidad que, debido a su especial configuración geológica,carece de ríos o corrientes de agua en superficie. Data de 1728 y se puso en marcha para sustituir a los molinos del río, que dejaron de funcionar a causa de la sequía.
Infografía de lo que podría ser la estructura exterior tradicional del caserío vasco.
Otros puntos de interés del recorrido fueron la ermita de Santiago, el caserío Goikoa y el caserío Batiz, todos ellos edificios singulares que forman parte de la ruta. Y la parada es obligatoria también en el caserío-palacio renacentista Urkixa, un baserri de principios del siglo XVIII convertido ahora en palacio rural. La ruta finalizó en otro palacio rural, Arana, un caserío gótico del siglo XVI que fue convertido en palacio barroco en el XVIII.
El arquitecto Anartz Ormaza, especialista en patrimonio cultural, explicó que la evolución histórica de la pequeña localidad de Lea Artibai es lo que ha permitido conservar este patrimonio. “Ispaster es un pueblo que se ha mantenido centrado en el primer sector y por eso los caseríos han mantenido sus explotaciones agrarias, se conservan fieles a sus orígenes. Y, en lo arquitectónico, casi milagrosamente han conservado los elementos más destacados de cada época”.
Y es que esta pequeña localidad es un museo vivo de la arquitectura tradicional rural del territorio, ya que cuenta con algunos de los caseríos más antiguos, mejor conservados y de estilos más variados no solo de Bizkaia, sino de Euskadi.
De manera que, a lo largo de dos jornadas, que contaron con la participación de 73 personas el sábado y 59 el domingo, y con la presencia de la Diputada Foral Elixabete Etxanobe, además de la alcaldesa del municipio, pudieron disfrutar del paisaje y escuchar las explicaciones de Anartz Ormaza, arquitecto especialista en patrimonio cultural, y Guillermo Ruiz de Erentxun, experto en caminos, guías de estas exitosas jornadas de senderismo cultural.
Posible continuidad
Por ello, la alcaldesa de Ispaster, Garbiñe Saenz de Buruaga, no descarta darle continuidad a la iniciativa “las plazas se agotaron muy rápido y, debido al número de personas que se apuntaron, decidimos dividir el grupo en dos jornadas. Ispaster es un museo vivo del caserío vasco y queremos seguir dando a conocer este patrimonio casi secreto y de enorme valor”, declaró.
Para todas las personas interesadas, su creador, el experto en caminos Guillermo Ruiz de Erentxun apunta que, a través de un recorrido de cuatro horas “fácil de hacer” la ciudadanía puede “conocer el lugar, su naturaleza y parte de nuestro patrimonio, incluyendo ermitas, palacios o incluso el molino de viento Aixeder, y disfrutar de un entorno de gran belleza”.
Esta iniciativa ha formado parte de la 24 edición de las Jornadas Europeas de Patrimonio, a través de las cuales Bizkaia está divulgando su patrimonio cultural a partir de las prácticas culturales y artísticas compartidas, o las creencias y los conocimientos adquiridos.
PUNTOS DE INTERÉS
Baserri
- ERKIAGABEKOA. Originario de finales del siglo XV, mantiene la estructura original de la Edad de Oro del caserío vasco. Cuenta con un robusto muro de cerramiento de aparejo gótico, al que en el siglo XVIII se le añadió un cuerpo de edificación lateral que aumentó las estancias.
Molino
- AIXEDER. Uno de los pocos molinos de viento que se conservan en Bizkaia. Situado en la cima de la colina de San Martín, en el barrio de Soluanes de Ispaster, y expuesto a los vientos procedentes del mar, domina el valle central de esta localidad. Data de 1728 y se puso en marcha para sustituir a los molinos del río, que dejaron de funcionar a causa de la sequía.
Palacios
- URKIXA. Caserío-palacio renacentista, un baserri de primeros del siglo XVIII convertido ahora en palacio rural.
- ARANA. Última parada de la ruta con este caserío gótico del s. XVI que fue convertido en palacio barroco en el XVIII.