Las tasas e impuestos municipales de Leioa subirán, con carácter general, un 2,5% el próximo ejercicio 2025. Sin embargo, hay dos excepciones: el gravamen de basuras crecerá un 50% para ajustarse a una directriz europea, y habrá incrementos superiores en tres supuestos del Impuesto de Bienes Inmuebles, el IBI.

Así, la tasa de recogida de desperdicios se actualizará en un 50%, lo que supondrá que 3 euros más al mes en la factura de cada contribuyente. Este cambio, según explican desde el Ayuntamiento leioaztarra, viene motivado por la obligación que tienen los consistorios de cumplir, a partir del próximo año, con la directriz europea –Directiva UE 2018/851 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018, y la Directiva Marco de Residuos 2008/98/CE del Parlamento Europeo y del Consejo– que establece que son las administraciones locales quienes deben asumir el coste real, directo e indirecto, del servicio completo: recogida, traslado y tratamiento.

En cuanto al IBI, tras la revisión de los valores catastrales realizada por la Diputación Foral de Bizkaia, Leioa variará este impuesto para las viviendas con un valor catastral de más de 200.000 euros, menos del 7% en Leioa; en el resto de los casos, casi el 83%, el IBI se mantendrá sin modificaciones. De tal modo, de 200.000 euros a 250.000 euros, el gravamen se incrementará en un 10%. De 250.000,01 euros a 300.000 euros, crecerá en un 15%. Y de más de 300.000,01 euros, aumentará en un 20%. En relación a este impuesto también, se mantiene el recargo del 50% por piso deshabitado, pero se han actualizado algunos supuestos que quedan exentos de este recargo: casos en los que la persona titular de la vivienda ha tenido que trasladarse a una residencia por motivos de dependencia, inmuebles con declaración de inhabitabilidad, viviendas vacías como consecuencia del desplazamiento temporal de la persona titular por motivos laborales o de formación…, entre otras.

Respecto al Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica a la subida prevista del 2,5%, se debe añadir un aumento con carácter retroactivo de otro 2,5% aprobada para 2024, pero que no ha llegado a aplicarse durante el ejercicio actual. De todas formas, existen bonificaciones: del 50% para vehículos que tengan una antigüedad mínima de 25 años; del 75% para los turismos eléctricos; del 60% o del 50% para híbridos con autonomía de más o menos de 40 kilómetros, respectivamente; y del 25% o del 40% para emisiones de menos de 120 o de 110 de CO2 al kilómetro, respectivamente. Los automóviles históricos están exentos de este impuesto.