Protegerse del calor
Al aire libre
• Evitar la exposición solar en las horas centrales del día. No exponer nunca directamente al sol a bebés de menos de 6 meses.
• Protegerse del sol mediante sombrero, gafas de sol y protector solar.
• Usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
• Evitar realizar actividad física intensa en episodios de altas temperaturas, y sobre todo durante las horas de más calor.
• Consultar con el personal sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y estén relacionados con las altas temperaturas (debilidad, fatiga, mareos, náuseas, visión borrosa, desmayo…).
En casa e interiores
• Mantener ventanas y persianas cerradas cuando las temperaturas son altas.
• Aprovechar el aire de la noche para ventilar y refrescar las estancias.
• Evitar, en las horas más calurosas del día, el uso de electrodomésticos y aparatos que produzcan calor.
• El uso de ventiladores eléctricos puede aliviar, pero cuando la temperatura supera los 35 °C, no son útiles para prevenir las enfermedades relacionadas con el calor puesto que no reducen la temperatura corporal.
• Si se nota mucho calor, tomar duchas o baños de agua fría. Otra alternativa es refrescarse el cuerpo, sobre todo cara y manos, con agua fresca y paños o esponjas mojadas.
• Si no es posible refrescar la casa, pasar de 2 a 3 horas del día en un lugar fresco (como un edificio público con aire acondicionado).
B. Evitar la deshidratación
• Beber agua y líquidos de manera frecuente, sin esperar a tener sed.
• Evitar consumir bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas. No calman la sed y favorecen la deshidratación.
• Aumentar el consumo de ensaladas, verduras y frutas, para reponer las sales minerales que se pierden por el sudor.
• Evitar las comidas grasas y demasiado abundantes puesto que dificultan la adaptación al calor.
C. Cuidar de las personas más vulnerables
• Aunque cualquier persona puede sufrir problemas por el calor, hay que prestar especial atención a bebés y menores de edad, a mujeres gestantes y lactantes, así como a personas mayores y con enfermedades.
• NUNCA se debe dejar a nadie en un vehículo estacionado y cerrado, aunque esté a la sombra.
• Las personas ancianas, sobre todo las que viven solas o son dependientes, pueden tener dificultades en adoptar medidas protectoras, conviene visitarlas, al menos, una vez al día.
En caso de emergencia llamar al 112