La empresa de producción de fertilizantes Profersa, cuya actividad fue paralizada cautelarmente por el Gobierno vasco debido a dos incidentes con emisiones, ha retomado la actividad tras recibir la autorización del Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente. La planta ubicada en el barrio bilbaino de Zorrotza había protagonizado dos percances el 26 de abril y 11 de mayo, en un lapso de menos de dos semanas, como consecuencia de reacciones químicas que generaron una nube de humo en la zona. Fuentes de la compañía apunta ahora que ambos incendios se debieron al “calentamiento inesperado” de una materia prima.
Desde la empresa, perteneciente al grupo Agaleus, apuntan que decidieron paralizar la actividad de motu proprio hasta que se esclarecieran los hechos, así como “conocer las causas del mismo e implementar medidas preventivas y correctoras que garanticen que no vuelva a suceder un incidente similar”. Paralelamente, el ejecutivo autonómico decretó la paralización de su actividad de formar cautelar el pasado 15 de mayo, mientras no se implantasen “las medidas necesarias” para evitar la repetición de incidentes como los que se produjeron en fechas previas al cierre. A principios de junio, Profersa entregó la documentación requerida para que se le autorizara a retomar su producción y, en los días siguientes, fue objeto de una inspección para llevar a cabo las comprobaciones pertinentes.
En lo que respecta al motivo que originó los incidentes, por los que se recomendó a la población cerrar puertas y ventanas, y permanecer en sus domicilios, desde la compañía apuntan que “las investigaciones puestas en marcha por Profersa para averiguar las causas del incidente han confirmado que el origen fue el calentamiento inesperado de una de las materias usadas en el proceso de producción de fertilizantes suministrada por un proveedor nacional”. Así, las mismas fuentes apuntan que “la alta temperatura de esta materia provocó una reacción en un fertilizante cercano”.
MEDIDORES DE LA CALIDAD DEL AIRE
Durante este tiempo, además, el Gobierno vasco ha instalado dos medidores de calidad del aire, uno en Zorrotza y otro en Elorrieta, después de que fueran requeridos a ello por un acuerdo plenario del Ayuntamiento de Bilbao. Están operativos desde el 7 y el 19 de junio. Asimismo, fuentes del Consistorio bilbaino confirman que, desde el pasado miércoles, hay un tercer medidor instalado en Zorrotza, tal y como anunció en el último pleno Asier Abaunza, concejal de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos. En la misma sesión, el edil insistió en que “no hay riesgo grave de accidente químico en Zorrotza”, basándose en la directiva europea que se aplica a empresas que manejan componentes peligrosos.
