El proyecto de construcción de más de 140 Viviendas de Protección Oficial (VPO) del Gobierno vasco y tasadas municipales en la zona de Tartanga se demorará debido a que la empresa promotora ha decidido renunciar. El Ayuntamiento de Erandiosigue apostando” por la edificación de estos bloques y lamenta “que se haya perdido la oportunidad de construir ya”, debido a la “alta demanda” que hay por parte de la ciudadanía de este tipo de domicilios, tal y como señaló ayer la alcaldesa, Aitziber Oliban.

Este plan iba a ejecutarse en régimen de cooperativa. Sin embargo, no se había conseguido el número pertinente de cooperativistas; es decir, no se habían vendido todos los pisos. Ante esta situación y analizando el contexto del mercado, ni la entidad responsable de las obras ni los propios compradores han arriesgado. De hecho, la empresa ha devuelto el dinero a todas las personas que adelantaron 15.000 euros al entrar a formar parte de esta iniciativa urbanística. O sea, no ha habido pérdida económica, pero sí una gran tristeza y rabia entre las cerca de 90 familias que iban a empezar una nueva etapa en estos hogares.

El pensamiento del equipo de gobierno de Erandio es que siga adelante esta promoción, que tendrá que ser, por obligación, de protección oficial y tasada municipal en estos terrenos pertenecientes a la empresa foral Azpiegiturak. Y es que el origen de que estos suelos sean edificables está en la reubicación de los vecinos afectados por el caso Abaroa. El de Tartanga es un proyecto que los regidores locales defienden convencidos y eso que hay voces en contra –como la plataforma Tartanga Berdea– que consideran que esta parte junto al polideportivo es un pulmón verde de Altzaga.