“Para el pequeño negocio, no es nada fácil la coyuntura”, asume Jon González, vicepresidente de Getxo Enpresa, la principal asociación comercial del municipio con cerca de 300 miembros. Por eso, desde el colectivo, que acaba de celebrar su asamblea anual, están siempre pensando en los pasos a dar para tratar de amortiguar los golpes. Uno de ellos, es el estudio promovido sobre los horarios comerciales con la intención de, aunque sea aún a largo plazo, avanzar hacia unos tiempos de atención al cliente “compatibles con la conciliación personal”, indica González.

Hay una cifra muy contundente: más de 300 comercios han cerrado en Getxo en la última década.

—Da mucha pena ir por la calle y ver cómo hay tantos locales cerrados. Para empezar, los alquileres son muy caros. A dos comercios que están cerca del mío les han pedido un aumento del alquiler que no han podido asumir. Uno de ellos era una frutería en un local de 40 metros cuadrados de una vía secundaria a la que le pedían 1.500 euros. Y para continuar, es necesario destinar partidas presupuestarias para la dinamización. A las nuevas generaciones hay que darles fórmulas para que quieran y puedan meterse en este tipo de proyectos. ¿De qué manera se los estamos vendiendo ahora?

Apela directamente a las instituciones.

—Sí. Pedimos a las administraciones que se impliquen y también en lo que tiene que ver con las subvenciones. Por ejemplo, nosotros como asociación solo recibimos ayudas municipales para dos proyectos al año. ¡Solo dos proyectos al año! Creo que se queda más que corto. Y eso, a pesar de ser la asociación mayoritaria con diferencia. Entendemos que deberíamos recibir una subvención proporcionada a los 300 asociados que tenemos. Y otra cuestión importante es que las administraciones tendrían que responder a estas subvenciones en un tiempo delimitado. No se puede pretender que tú ejerzas dos proyectos en un año y que sea abril y no sepas si te van a conceder la subvención para ellos. Necesitamos apoyos para que Getxo, en una década, no sea un lugar exclusivamente residencial. Es hacia lo que vamos ahora mismo.

La asociación acaba de realizar un estudio sobre los horarios comerciales. ¿Qué conclusiones extrae?

—El 85% de la gente de Getxo consume en Getxo y para mí es algo fundamental. Luego, entendemos por el estudio que no hay demanda de otros horarios de apertura. Pero sí creemos que, con el tiempo, se va a ir hacia un ajuste de horarios, más europeos, pero hay que dar muchos pasos antes. Lo que sí vamos a hacer ahora es tratar con los grupos de trabajo que hemos formado si podemos reorientar los horarios, porque igual hay momentos del día en los que no hay actividad de cara al cliente, pero sí puede haber alguna franja de horarios, vinculada sobre todo al mediodía, con la que se puede experimentar abriendo, si el sector está dispuesto a ello. Estos grupos de trabajo los vamos a centrar por subsectores de actividad e, incluso, por barrios.

¿Unos horarios más compatibles con la vida personal pueden ayudar a que las nuevas generaciones sigan con el negocio familiar?

—Así lo creemos. El horario es determinante. De hecho, muchos de los que tienen problemas con el personal son subsectores con horarios muy amplios: hostelería, belleza… Por eso, cuando hablamos de cambios de horarios no nos referimos, en ningún caso, a una ampliación, sino a un ajuste y una adaptación razonable. Porque hay comercios que igual de 10.00 a 12.00 no tienen apenas clientes. En mi situación, yo podría abrir de 12.00 a 14.00 y de 17.30 a 20.00 y cubriría el 85% de las ventas realizadas. Eso, en mi sector. Hay otros en los que tiene más sentido abrir a mediodía y luego cerrar a las 18.00. Es un tema a reflexionar y tiene que haber un consenso mayoritario.

La idea es que de esos grupos de trabajo y de debate salgan también otros proyectos piloto.

—Hay una serie de medidas que contrastaremos con estos grupos de trabajo pero que, desde la junta directiva hemos considerado, de forma unánime, que son buenas e interesantes: por ejemplo, la instalación de taquillas. En ellas, el propio comercio deposita y el cliente recoge en esos horarios en los que el negocio no está disponible. Es otra posibilidad añadida sin tener que abarcar tantas horas de comercio.

¿Qué más propuestas manejan desde Getxo Enpresa?

—Entre otras, queremos organizar un encuentro con los diferentes asociados para hacer comunidad y conocernos mejor; para crear una red porque somos un colectivo muy grande y hay que fomentar más las relaciones personales. Es una manera de compartir y de generar vínculos entre nosotros.