Las peligrosas curvas del tramo central del puerto de Barazar serán en unos años historia. El proyecto para habilitar un tercer carril en la subida hacia Gasteiz supondrán modificar el actual trazado por otro con elipses más anchas y seguras, que permitirán incluso que dos camiones articulados se puedan cruzar sin problema en pleno radio.

La carretera N-240 es la alternativa que utilizan muchos conductores para circular entre el área metropolitana de Bilbao y la capital alavesa; aunque es de pago para camiones desde el 1 de enero del año pasado, todavía sigue siendo gratuita para turismos. Por ello, soporta a diario una intensidad de tráfico muy elevada, de cerca de 5.000 vehículos, casi un tercio de ellos pesados. Es decir, cada día de media circulan por el puerto la friolera de 1.500 camiones y tráileres, que en su mayor parte realizan trayectos de largo recorrido o de paso. Las previsiones son, además, que esa cifra vaya en aumento: para el año 2045 se alcanzarían los 7.223 vehículos al día, con un 37,3% de ellos camiones, un total de 2.045.

El itinerario es sinuoso, en particular el tramo con curvas en forma herradura, con una fuerte pendiente ascendente –del entorno del 6% de media–, y numerosos tramos sin visibilidad, lo que reduce los espacios en línea recta para realizar un adelantamiento con la seguridad adecuada. Todo ello, en un trazado que cuenta con dos carriles, uno por cada sentido, cuyas dimensiones resultan insuficientes para el paso y de los vehículos más largos, que llegan a paralizar la calzada del sentido contrario cuando tienen que tomar una de las curvas, ya que ocupan también el segundo carril. Con el añadido de que, en la mayor parte del recorrido, no existen arcenes. En el entorno proliferan las edificaciones aisladas, que cuentan con conexiones a nivel en condiciones precarias en la mayoría de los casos. Todo ello deriva en graves problemas de seguridad en el tramo, con una alta accidentalidad.

Por todo ello, la Diputación Foral de Bizkaia proyecta la construcción de un tercer carril en el lado norte del puerto de Barazar, que complete los ya existentes, a su paso por Zeanuri, a lo largo de 3,4 kilómetros, en concreto entre los puntos kilométricos 3+450 al 33+780. Además de permitir que los camiones puedan circular por ese segundo carril de subida hacia Barazar, el proyecto contempla también una variante del trazado, justo en las curvas de herradura más cerradas, que serán sustituidas por otras con un radio de curvatura más ancho.

Paso simultáneo de camiones

El nuevo trazado aprovecha al máximo la plataforma actual, ajustando el diseño para permitir una velocidad máxima de 50 kilómetros por hora, ampliando para ello la calzada hacia el lado del monte. La calzada pasará a tener tres carriles, dos de ellos en el sentido de subida hacia el puerto, de 3,5 metros de anchura para cada uno. La plataforma se completa con dos arcenes de 1,5 metros, que puede facilitar el eventual paso de ciclistas y las paradas de emergencia. El nuevo diseño permitirá, por ejemplo, el paso simultáneo en cada carril de un camión articulado en cualquier sección del proyecto. También se incluirá un lecho de frenado en la segunda mitad del recorrido y de dos zonas de parada de emergencia, una en cada sentido.

Pero lo más llamativo del proyecto, que ha estado en fase de información pública hasta el pasado día 1 para que se pudieran presentar alegaciones o sugerencias que se estimaran oportunas, es la variante que plantea en las curvas más cerradas del recorrido, un subtramo de aproximadamente un kilómetro de longitud.

Actualmente, una vez superado el núcleo urbano de Zeanuri y el pantano de Undurraga, el conductor se encuentra primero con una curva cerrada a la izquierda, dos pequeñas rectas con otro ligero giro también a izquierdas, otra curva muy cerrada de casi 180 grados hacia la derecha y otra más suave de nuevo a la izquierda un poco más adelante.

Con el nuevo diseño, la carretera seguirá recta unos metros antes de tomar la primera curva a la izquierda que, pese a girar casi 180 grados, ganará en radio abriéndose más. El trazado hasta la siguiente curva será recto, antes de llegar a virar a la derecha, de nuevo en una elipse mucho más ancha que se traza unos metros pendiente arriba respecto a la calzada actual. La pendiente máxima no sobrepasará el 8% y se minimiza el impacto en el entorno, uno de los condicionantes que más se tuvo en cuenta en el intenso estudio de trazado, que llegó a analizar al detalle hasta once soluciones diferentes para alcanzar la óptima.

Para la ejecución de las obras, que se prolongarían en principio durante 36 meses según el proyecto inicial, se plantearán diferentes fases para mantener en servicio todo el tráfico de la carretera, alternando cambios de carriles de circulación entre los tramos existentes y los tramos de nueva ejecución.

Otros elementos

Estructuras

Paso inferior. Hacia la mitad del recorrido, en la subida al puerto de Barazar, se habilitará un paso inferior para facilitar el cambio de sentido. También se ejecutarán dos viaductos para mejorar las condiciones de paso del arroyo Astepe y la fauna. Se han definido, además, diez conexiones con suficiente visibilidad desde las edificaciones del entorno.

Pasos de fauna

Medio ambiente. Se construirá un paso de fauna, en el tramo inicial, para garantizar la conectividad ecológica para animales como corzos, jabalíes, visón europeo, nutrias y zoros, que habitan en la zona. También se realizarán siembras para la integración urbanística de la infraestructura.

60,4

Presupuesto. El presupuesto de las obras asciende, según el proyecto, a 60,4 millones de euros. En él se incluye casi un millón de euros en expropiaciones e indemnizaciones que se tendrán que llevar a cabo.