En 2023, hemos arrancado una nueva legislatura, avanzado a buen ritmo en los trámites para acercarnos a la solución definitiva que asegure la garantía de abastecimiento de Urdaibai, y hemos puesto en marcha nuestro Plan Estratégico de Energía. 2023 ha sido también el año en el que se ha calificado el proyecto UR DATA como uno de los diez mejores del Estado, otorgándole más de 7,3 millones de euros de los Fondos Next.

A lo largo de estos 12 meses, hemos completado, casi en su totalidad, los procesos de estabilización de la plantilla. También hemos organizado y clausurado con rotundo éxito congresos internacionales, estatales y de ámbito local, posicionándonos como referentes para el sector, recibiendo el premio a la ‘Entidad Innovadora de 2023’ y entregando otros seis premios ‘Lurra’ al compromiso de personas y entidades vinculadas con Bizkaia. Por suerte, agotaría este espacio recogiendo más referencias clave para el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia (CABB) en 2023. 

Un largo detalle de hitos afianzando los procesos de este año en un nuevo mandato como presidente totalmente volcado en lo que para mí es el concepto que aúna los pilares de esta entidad; regulación, confianza, compromiso, estabilidad y medioambiente. 

La estación de bombeo de Bedia permite reducir desbordamientos en caso de fuertes lluvias.

Gobernanza del agua

Como gestores públicos, somos conscientes del necesario, pero no siempre sencillo, equilibrio entre gobierno, sociedad y sostenibilidad para lograr un desarrollo económico, social e institucional estable, viable y coherente con los recursos disponibles; la normativa, la digitalización, el cambio climático y la energía. Considero que el sector del agua, de norte a sur y de este a oeste, está altamente cualificado y preparado. 

Sin embargo, la gobernanza del agua llega a un punto de inflexión en el que la actualización de normativas, los avances tecnológicos, los desafíos climáticos y la necesidad de mejorar la eficiencia energética convergen para redefinir el futuro de la gestión del ciclo integral del agua. 

En 2023, en torno a dos mil millones de personas no cuentan con acceso al agua potable y 3.600 millones carecen de acceso a un sistema de saneamiento y almacenamiento eficaz. Temas trascendentes, exigentes y de vital importancia para el sector que obligan a avanzar en la anticipación, en acudir a todas las herramientas disponibles para prever y generar modelos para atender los distintos escenarios que, de manera súbita, puedan darse en el corto plazo. 

Normativa europea

La nueva Directiva sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas de la Unión Europea, actualmente en elaboración, es un instrumento esencial para alinear nuestros esfuerzos con los compromisos ambientales europeos. Esta normativa propone tres grandes bloques; reducir la carga de contaminación vertida al medioambiente, alinearla con el Pacto Verde Europeo y los nuevos retos, y la gobernanza

Sin embargo, actualmente hay discrepancias en torno al tamaño de las aglomeraciones que ha de tener el sistema de colectores, el contenido de los planes integrados de gestión, el tratamiento terciario y cuaternario, la responsabilidad ampliada del productor, los aspectos relacionados con la neutralidad energética, así como los plazos de tiempo para estos requerimientos. 

A pesar de ello, a través de nuestro posicionamiento en los órganos de toma de decisiones, haremos valer aquello que genere mayor seguridad y bienestar para los municipios consorciados. Es indudable que, técnicamente, el sector está preparado, pero no es menos cierto la necesaria y sólida financiación que va a hacer falta para acometer esas costosas actuaciones. En este punto, quiero trasladar a la ciudadanía atendida en nuestro ámbito de actuación, que el CABB es una entidad solvente, sin endeudamiento, y cuyas actuaciones cuentan con financiación para completar su ejecución como mínimo hasta 2031.

Todo ello, para continuar con nuestros principios de homogeneidad, progresividad y garantía del servicio en un contexto en el que los impactos del cambio climático son cada vez más notables y el sector del agua se encuentra entre los más afectados. La gestión de un recurso vital como el hídrico se convierte en un desafío en un escenario de escasez, pero también en períodos de lluvias extremas, donde el drenaje urbano es clave para mitigar los efectos. 

Los sistemas de carbón activo de la ETAP de Venta Alta garantizan la calidad del agua de consumo.

Digitalización

La digitalización emerge como una gran aliada para optimizar la gestión del agua, agilizando procesos, ayudando en la toma de decisiones y aumentando la eficiencia en la operación de los servicios de agua. Si las cuestiones a decidir recaen sobre el agua, un derecho humano y, además, un recurso limitado, las exigencias son mucho mayores. Hablando sobre la gestión de la energía en el Consorcio, donde el 80% del agua que gestiona proviene de los embalses del sistema del Zadorra, digitalizar es ahorrar. 

Desde el CABB, hemos tratado de aprovechar la superficie de los depósitos de agua tratada para implantar una instalación fotovoltaica, consiguiendo así con uno de los depósitos “producir todos los requerimientos energéticos de la planta en las horas de sol.” Junto con la racionalización del consumo energético, la digitalización nos ha permitido analizar las inversiones en todos esos pequeños bombeos dispersos con el fin de ver si están funcionando adecuadamente, de manera que han logrado optimizar los patrones de consumo. En definitiva, predicción, anticipación y optimización.

Proyecto UR DATA

En el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por los Fondos Next Generation de la Unión Europea, el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia resultó beneficiario con 7.352.492,3 millones de euros para su proyecto UR DATA, dentro de la primera convocatoria de subvenciones del PERTE para la digitalización del ciclo del agua. Además, acaba de presentar más actuaciones en la segunda convocatoria cerrada el pasado día 22.

El proyecto tiene como objetivo promover una gestión del agua más eficiente, sostenible y equitativa, mediante la implementación de una serie de herramientas y tecnologías que permitan una mejor comprensión y conocimiento de los recursos hídricos, así como una mejor gestión de los mismos para reforzar la garantía de abastecimiento. Estas herramientas y tecnologías incluyen sistemas de información geográfica, modelos de simulación hidrológica, sistemas de monitoreo, y herramientas de análisis de datos.

UR DATA engloba a 30 municipios de las comarcas vizcaínas de Busturialdea y Lea Artibai. De todas ellas, sólo cinco superan los 5.000 habitantes y un período de ejecución de tres años (2022-2025), de manera que su desarrollo contextualiza e integra las distintas realidades de cada uno de los municipios que componen estas comarcas y las articula con el resto del territorio, definiendo objetivos y estrategias de intervención. 

Mirando al 2024

La asamblea general del Consorcio aprobó un presupuesto de 233,3 millones de euros, el más alto de su historia, para atender a la necesidad de dar respuesta al importante incremento de los costes de explotación y mantenimiento, así como de los materiales de las obras a realizar, fundamentales para mantener el ritmo inversor que requiere el territorio histórico en materia de agua. 

Las nuevas infraestructuras de abastecimiento y saneamiento dispondrán de más de 80 millones, financiados, casi en su totalidad, con recursos propios, para continuar con las obras en las redes municipales de distribución, las obras de abastecimiento en Busturialdea, el nuevo depósito de abastecimiento regulador del sistema Arratia y el sistema Lekue, los nuevos recursos de abastecimiento en la ETAP de Ondarroa, el tanque de tormentas de Zuazo-Galindo, la ampliación de la EDAR (estación depuradora de aguas residuales), las nuevas conducciones en Muskiz o la obra de la EDAR de Bakio.

La asamblea aprobó también la revisión de las tarifas por los servicios de abastecimiento, saneamiento y depuración para 2024, actualizándose la tarifa en 1,5 euros/mes (IVA incluido) para un consumo medio domiciliario cuya recaudación se destinará a concretar el compromiso inversor y transformador que requiere el territorio para modernizar sus infraestructuras, prestar servicio en idénticas condiciones en los municipios que se incorporen, como es el caso de Busturialdea, y anticiparse a los problemas que pueden emerger como consecuencia del cambio climático, bien por falta de recursos hídricos o, al contrario, por episodios de climatología adversa continuadas de abundante precipitación.