El cementerio británico de Loiu homenajeó recientemente a las personas que murieron sirviendo a su país durante la Primera y Segunda Guerra Mundial. La emotiva ceremonia sirvió para recordar y honrar a los miembros de las fuerzas armadas y de la marina mercante del Imperio Británico que dieron su vida durante las dos guerras mundiales.

En este sentido, la iglesia de la Trinidad de Loiu, ubicada cerca de la torre de control de aeropuerto, celebró este pasado domingo, al igual que en Londres y otros países pertenecientes a la Commonwealth, el Remembrance Sunday Day, es decir, el Día del Recuerdo, también conocido como Día de la Amapola o Día del Armisticio.

Por parte del Ayuntamiento de Loiu asistieron el alcalde, Josu Andoni Begoña, y la concejala, Vanesa Uriarte, junto a diversos familiares quienes recordaron a las víctimas guardando un minuto de silencio. Posteriormente, se colocó una corona de amapolas en el cenotafio. A esa misma hora, se hizo lo propio en el centro de Londres.

Josu Andoni Begoña y Vanesa Uriarte asistieron al homenaje.

En el cementerio británico de Loiu descansan 56 miembros de la Commonwealth y aliados de otras nacionalidades caídos durante las contiendas bélicas. La mayoría de ellos estuvieron en un primer momento enterrados en otros camposantos del norte y noroeste del Estado, donde la gestión y mantenimiento de sus tumbas no resultó una tarea sencilla. Por ello, los restos fueron trasladados a Loiu por la Commonwealth War Graves Commission. Asimismo, también hay siete tumbas de caídos en la Primera Guerra Mundial. Sobre esta línea, el origen de este camposanto británico se remonta al siglo XVIII, pero en otra ubicación. En concreto, primero ocupó una parcela a orillas de la ría del Nervión, en lo que hoy se conoce como la Campa de los Ingleses o la Isla de los Siete Árboles, un espacio donde actualmente se encuentra el museo Guggenheim. Posteriormente, tras cuestionarse la existencia del cementerio en el centro urbano, en 1926 se adquirió un solar en Loiu que fue consagrado en 1929 por el obispo anglicano de Gibraltar y el párroco católico de Loiu. El cementerio cuenta con 10.000 metros cuadrados y dos capillas.