Un total de 1.061 millones de euros. Es la gasolina que utilizará el motor foral en que se va a convertir el departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial esta legislatura, según la presentación que ha realizado esta mañana de martes el responsable del área, Imanol Pradales.
Un gran cantidad de dinero que no solo va a dirigirse a la construcción de nuevas carreteras o corredores viarios sino a otras muchas actuaciones encargadas por otros departamentos forales y proyectos no viarios. Pradales ha dicho que este plan de legislatura "es un compromiso firme para transformar Bizkaia, promoviendo la innovación, la sostenibilidad y un desarrollo territorial equilibrado".
Son cuatro las líneas básicas de actuación a desarrollar. En concreto, la transformación de Bizkaia a través de sus infraestructuras, la innovación en la red viaria, promover su sostenibilidad y transición energética y prepararse para el desarrollo futuro de una Bizkaia equilibrada.
Cambio de paradigma de movilidad
En cuanto a la primera, Pradales ha destacado que "estamos ante un cambio de paradigma en la movilidad viaria de Bizkaia" con la futura ejecución del túnel bajo la ría y la reciente apertura de la conexión de la VSM y la AP-68. Sobre la actuación del subfluvial entre las rotondas de Artaza y Ballonti ha especificado que "el proyecto constructivo está a punto de concluir y las obras empezarán en 2024".
El diputado puso en valor la red de carreteras no solo "por la conectividad externa" con el resto del Estado y Europa, también "con la conectividad interna con actuaciones en todas las comarcas". Otras obras en el mapa viario serán la variante de Etxebarria a Markina, finalizar los accesos a Ermua y mejorar el trazado de la BI-631 entre Bidebieta y el alto de Sollube.
Actuaciones no viarias
Plegando el plano de carreteras, el departamento también asumirá la ampliación de BAT, con las fases 2 y 3 en la Torre Bizkaia, estrenará nuevas residencias y centros de día EtxeTIC, creará nuevos elkartegiak y tratará a nivel urbanístico la ampliación del Museo Guggenheim en Urdaibai.
"Hay que gestionar con mayor eficiencia la red y su demanda e invertir solamente en aquellas nuevas infraestructuras y modos de transporte que sean estrictamente necesarios"
Por lo que se refiere a la innovación en las infraestructuras viarias, Pradales dejó aparte la creación de nuevas infraestructuras de base a propiciar otra política "orientada a gestionar con mayor eficiencia la red y su demanda e invertir solamente en aquellas nuevas infraestructuras y modos de transporte que sean estrictamente necesarios".
Ha apostado por la descarbonización de la movilidad "con la incorporación de las nuevas tecnologías a la red viaria, la optimización de los sistemas de gestión, y una digitalización que permita avanzar hacia el vehículo eléctrico, autónomo y conectado".
Sostenibilidad
En cuanto a la sostenibilidad y transición energética, Pradales ha detallado que se va a avanzar en la movilidad ciclable con la futura apertura del bulevar de la ría y el puente móvil Barakaldo-Erandio, nuevas bicipistas y bidegorris interurbanos o la colaboración con los municipios de Bizkaia en el diseño y desarrollo de su red ciclable. Otras actuaciones serán "incidir en la eficiencia energética de la red, reducir el impacto acustico del tráfico y promover la economía circular en la red", ha desgranado Pradales.
Finalmente, a la hora de prepararse "para el desarrollo futuro de una Bizkaia equilibrada", el diputado foral ha especificado intervenciones como la aprobación del PTS de carreteras 2023-2035 y del PTP Bilbao Metropolitano que "va a marcar su desarrollo en los proximos 20 años", ha apostillado. También ha detallado el despliegue del PTS de Vías Ciclistas 2023-2035 o planificar la integración de la AP-68 a partir de 2026 cuando pasará a manos forales en la gestión global de las autopistas de Bizkaia.