Los vizcainos se resignan a la subida de la gasolina. Muchos aseguran que van a cambiar los hábitos y en vez de realizar viajes largos, se van a tener que conformar con excursiones más cerca. "Cambiaremos de tercera a quinta directamente", asegura Eder de la Torre, un conductor que esta mañana se encontraba en Bilbao. Conducción económica. Esto es lo que van a aplicar los millones de conductores para intentar ahorrar en el combustible para sus vehículos. Para que la subida de carburante no suponga un sobrecoste económico Eder ha decidido desde su móvil descargarse la aplicación GasAll para localizar las gasolineras más cercanas y al mismo tiempo con mejores precios. Pequeños trucos que sirven para no llegar tan ajustados a final de mes.
En pleno mes de agosto el sol o la playa deberían ser las palabras más recurrentes en boca de la ciudadanía. Si bien el calor infernal que ha azotado a la villa estos días es un tópico más entre los bilbainos, al tema estrella de la última semana se le acaba de unir el incremento del precio del combustible. Después de un 2022 marcado por la crisis energética que desencadenó la guerra de Ucrania, tanto gasolina como gasóleo han repuntado de media en la última semana un 1,8% y un 3,4% respectivamente.
Entre turistas y visitantes que pasean tranquilamente, son muchas las personas que acuden a diario a la villa en coche para trabajar. Aunque el incremento del combustible no haya pasado desapercibido por ninguno de ellos, parece que el ambiente estival y veraniego que reina en la ciudad a escasos días de Aste Nagusia les ha ayudado a tomarse la noticia con calma y, en algunos casos, hasta con humor.
Ansiosos de que lleguen sus esperadas vacaciones, algunos de los bilbainos que a mediados de agosto siguen con horario de oficina percibirán este incremento en el momento de salir a la carretera. Uno de ellos es el mungitarra Julen Canales, que pendiente de viajar a Alemania en coche en los próximos días ha recibido la noticia con las mismas dosis de resignación que de humor. “Después de informarme de la subida de la gasolina prefiero ni pensar en lo que tendré que repostar a lo largo del camino”, comenta el joven mientras ríe. Algo más de suerte han tenido otras personas que como la vecina de Leioa Elena han contado con más margen para ajustar el presupuesto de gasolina en sus próximas escapadas. “Este verano en lugar de hacer viajes más largos aprovecharemos para hacer excursiones cercanas”, comenta.
CAMBIO DE RESIDENCIA
Ante este último repunte, el transporte público se posiciona como la mejor opción que tienen los ciudadanos para desplazarse de un lado a otro. En este sentido, la bonificación 50% en el precio del transporte público que se mantendrá hasta finales de año ha supuesto un alivio para gente que como Elena opta por viajar más en autobús. “Recientemente al haberme mudado a Leioa he podido reducir el uso del coche al estar bastante mejor comunicado para viajar en transporte público”, relata. Sin embargo, son muchas las personas que se ven obligadas a utilizar su vehículo particular a diario. “Mi día a día está muy condicionado, para hacer cualquier trámite o incluso la compra me veo obligada a coger el coche” explica María Josefa, residente del barrio bilbaino de Buia.
En cualquier caso tampoco faltan otras soluciones originales para afrontar la reciente subida. Siendo una de las personas más resolutivas a este respecto, Eder de la Torre no ha dudado en echar mano de herramientas tecnológicas para hacerse con el carburante más barato.
Mientras el encarecimiento del combustible se suma a la importancia de cuidar el medio ambiente, el vehículo eléctrico supone otra alternativa. Sin embargo, si en algo coinciden los bilbainos es en que por el momento no piensan en cambiarse al coche eléctrico. Aunque la mayoría de ellos sí que lo contempla a largo plazo, las respuestas son de lo más variadas. Así, a pesar de que los datos arrojados por la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) aseguren que la cuota de coches eléctricos puros sobrepasará el 70% para 2030, los bilbainos tienen serias dudas acerca de su autonomía además de creer que se trata de una inversión demasiado costosa. “Entre la subida de la gasolina y de los precios de la luz no creo que el vehículo eléctrico sea lo mejor por ahora”, concluye Elena.
