La forma de gobernar del PNV y Amaia del Campo seguirá imperando en Barakaldo, al menos, cuatro años más. La sesión de investidura celebrada en el mediodía de ayer en el salón de plenos del Ayuntamiento de Barakaldo respaldó lo que votaron los barakaldarras el pasado 28 de mayo en unos comicios en la que la del PNV fue la lista más votada. De este modo, con los votos favorables de los once ediles del PNV y los siete del PSE, Amaia del Campo fue elegida como alcaldesa de la localidad fabril por tercera ocasión consecutiva. “Puedo asegurar que siento la misma emoción, el mismo compromiso y responsabilidad, incluso más, que cuando fui nombrada por primera vez alcaldesa de nuestro pueblo”, apuntó Del Campo.

Misma emoción que aquel día de junio de 2015 en la que fue investida por vez primera como alcaldesa de Barakaldo –la primera alcaldesa en la historia de la localidad fabril– pero el escenario es completamente distinto al que se dibujó hace ocho años. En aquella ocasión, Del Campo y el PNV ganaron por menos de un centenar de votos en unos comicios que sirvieron para acabar con tres décadas de gobierno socialista en el municipio. En el pleno que se constituyó ayer, los jeltzales parten en una situación mucho más favorable merced a los once ediles obtenidos el pasado 28 de mayo, cuatro concejales más que el PSE, partido que sigue siendo la segunda fuerza del municipio. Un camino que no ha estado, ni mucho menos, exentode dificultades y momentos más que delicados. “Como alcaldesa he vivido momentos emocionantes que no olvidaré jamás. Pero también he vivido los más duros. Cuando hace 4 años juré mi cargo como alcaldesa, no podía ni imaginar que tendríamos que enfrentarnos a una pandemia mundial. Aun así, hemos cumplido nuestra palabra. Hemos sido capaces de cumplir nuestro programa”, afirmó la primera edil barakaldarra.

Esa pasada legislatura fue una cadena de momentos difíciles y duros que, también han servido para ampliar la experiencia al frente de la institución de Del Campo y su equipo de trabajo. Con la investidura de ayer se inicia una nueva etapa en la localidad fabril, un nuevo reto que Amaia del Campo asume “con ilusión, compromiso y responsabilidad. Hoy Barakaldo es una ciudad mejor que hace 4 años. Hemos cumplido nuestra obligación, trabajar para mejorar la vida de nuestros vecinos y vecinas, para dotar a nuestros barrios de más y mejores servicios. Soy consciente de que he cometido errores y de que no habré sido capaz de satisfacer todas las expectativas y os pido públicamente disculpas por ello. Espero aprender se esos errores para no volver a cometerlos y estar a la altura de lo que los barakaldarras esperáis de mí”.

Asimismo, en su intervención tras ser investida como alcaldesa, Del Campo tendió la mano al resto de formaciones políticas con representación en el pleno barakaldarra para, a lo largo de los próximos cuatro años, buscar acuerdos. “A los hombres y mujeres que conformáis esta nueva Corporación quiero pediros vuestra ayuda. Necesitamos todas nuestras manos unidas trabajando para ayudar a nuestros vecinos y vecinas. Espero que esta sea la legislatura del diálogo y la colaboración. Tenéis mi teléfono, que siempre estará encendido para vosotros y vosotras. Mi puerta nunca se cierra. Estoy convencida de que todos y cada uno de nosotros y nosotras ha venido hoy con emoción y dispuesto a dar lo mejor de sí mismos por nuestro pueblo”, concluyó Del Campo.