Hoy, 5 de junio, se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, una edición que si bien pone la mirada en luchar contra la contaminación del plástico, marca un hito al celebrarse el 50 aniversario de dicha efeméride establecida por las Naciones Unidas en 1972. Desde entonces, este día internacional ha llegado a convertirse en una de las plataformas mundiales con mayor alcance en favor de las causas ambientales. Decenas de millones de personas se han sumado a participar de manera virtual y presencial en actividades, eventos y todo tipo de iniciativas alrededor del mundo.

En esta ocasión, se ha fijado como objetivo luchar contra la contaminación de los plásticos, con Côte d’Ivoire como país anfitrión, quien prohibió el uso de bolsas plásticas en 2014 y, desde entonces, ha estado apoyando la transición hacia envases, envolturas y embalajes reutilizables. La ciudad más grande del país, Abiyán, se ha convertido en la actualidad en un centro para nuevas empresas orientadas a combatir la contaminación por plásticos.

Y no hay más que apoyarse en los datos. Más de 400 millones de toneladas de plásticos se producen en el mundo cada año, de los cuales la mitad se conciben para una vida útil de un sólo uso y de ellos, menos del 10% se recicla. Se estima que entre 19 y 23 millones de toneladas de desechos plásticos terminan cada año en lagos, ríos y mares.

Asimismo, los microplásticos (partículas plásticas cuyo diámetro es inferior a 5 mm) invaden los alimentos, el agua e incluso el aire. Además, los productos plásticos de un sólo uso que resultan desechados o quemados no solamente perjudican a la salud humana y la biodiversidad, sino que igualmente contaminan todo tipo de ecosistemas, desde los picos de montaña hasta el lecho marino.

Tomando de base estas afirmaciones, el objetivo que se plantean las Unidades Unidas este año es hacer frente al problema de la contaminación por plásticos si se aprovechan los avances científicos y las soluciones existentes.

Para resolver esta crisis, se hace un llamamiento a los gobiernos, el sector privado y demás partes interesadas para que amplifiquen e implementen medidas eficaces dirigidas a tal fin. Por tal motivo, resulta primordial que el Día Mundial del Medio Ambiente movilice medidas ambientales transformadoras en todos los rincones del mundo.

Pero si bien el protagonismo de este año recae en Côte d’Ivoire, también ha contado con el apoyo del Gobierno de los Países Bajos, un país ejemplar que ha implementado medidas ambiciosas relativas a todo el ciclo de vida del plástico. 

Así, como ejemplo, resaltar que los Países Bajos firmaron la adopción del Compromiso Global por la Nueva Economía del Plástico e integraron la Alianza Mundial sobre la Basura Marina, además de formar parte de la Coalición de Alta Ambición que pretende elaborar un instrumento internacional jurídicamente vinculante para combatir la contaminación por plásticos.

La contaminación por plásticos y sus efectos perjudiciales en la salud, la economía y el medio ambiente no pueden ser ignorados. Se requiere tomar medidas urgentes. Asimismo, este problema nos exige soluciones verdaderas, firmes y eficaces”, han declarado desde el gobierno de los Países Bajos. 

“Entre un gran número de políticas elaboradas en materia de productos plásticos, los Países Bajos y la Comunidad Europea en general se han comprometido firmemente a reducir la producción y el consumo de plásticos de un sólo uso, que puede y debe ser reemplazado por alternativas duraderas y sostenibles”, han confirmado.