El polígono Ibarzaharra de Sestao acogerá un polo sanitario que permitirá a empresas especializadas desarrollar y validar sus dispositivos médicos. El edificio contará con un total de seis plantas, una superficie de más de 11.000 metros cuadrados y, entre sus servicios, incluirá un minihospital orientado a la prueba de este tipo de artículos.

Osasun Poloa, como se denominará el proyecto, quiere convertirse en una referencia para las empresas especializadas en sistemas de validación y certificación de dispositivos médicos. El edificio, que se ubicará en el polígono Ibarzaharra de Sestao –concretamente en la parcela SZ TO 01–, estará abierto a las empresas que quieran desarrollar sus dispositivos médicos en Euskadi, apoyándoles en sus fases de ensayo funcional, ensayos clínicos y validación y certificación final. Permitirá, así, que puedan diseñar, desarrollar y fabricar dispositivos médicos y productos sanitarios.

En total, el edificio de Sestao contará con seis plantas, que ofrecerán un total de 11.300 metros cuadrados sobre rasante para la implantación de empresas. En la planta baja, además del acceso general al edificio, con una zona de recepción y otras áreas comunes como aseos, ascensor y escaleras, se habilitará un pequeño hospital, orientado a la prueba de dispositivos médicos, que permitirá el acceso a ambulancias.

El resto de plantas estarán reservadas a las empresas de investigación y desarrollo en el ámbito de la salud que quieran implantarse en este polo, con espacios diáfanos en su totalidad para que puedan adaptarse a sus necesidades, ya que, por ejemplo, pueden requerir instalaciones de laboratorio.

El proyecto

Sprilur, sociedad pública dependiente del departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, adjudicará en los próximos días la redacción del proyecto y la dirección de las obras de ejecución del futuro edificio, que supondrá una inversión de algo más de medio millón de euros.

La empresa adjudicataria tendrá seis meses para redactar el proyecto básico y constructivo; a partir de ese momento, y tras volver a sacar a concurso las obras de construcción en sí, la ejecución de los trabajos para levantar el edificio se prolongará, según las primeras estimaciones, en torno a 24 meses.

El edificio, que contará con un diseño exterior singular y funcional, tendrá muy en cuenta la eficiencia energética; el objetivo es que su calificación de consumo de energía sea casi nulo, a través de la combinación de aspectos como la orientación, los materiales que se utilicen, el uso de las energías renovables y su iluminación. Así, contará con medidas pasivas de arquitectura bioclimática, aprovechando por ejemplo la incidencia de los rayos del sol, o una envolvente que reducirá las pérdidas de calor, una especie de colchón térmico que aislará térmica y acústicamente. Se instalará, además, un equipo de geotermia para el acondicionamiento térmico del edificio y se utilizarán materiales naturales y cerámicos, que serán de color claro en las estancias para minimizar el gasto energético.

Incluso recogerá el agua de lluvia, almacenándola y haciéndole un pretratamiento, para que después sea utilizada para las descargas de los inodoros y el riego de zonas verdes, ya que estos servicios no requieren agua potable.

Espacio en crecimiento

El polígono Ibarzaharra se encuentra actualmente en pleno proceso de crecimiento, algo que está contribuyendo a la regeneración de esta zona situada a caballo entre Trapagaran y Sestao, que antaño acogió las instalaciones de la histórica Babcock Wilcox y que en los últimos años se había convertido en una ruina industrial sin ningún tipo de actividad.

Ahora, con una inversión de 100 millones de euros, aspira a convertirse en una referencia para futuras iniciativas empresariales, con todos los servicios necesarios para aquellas empresas que quieran asentarse en Bizkaia y en Euskadi. El gigante de la distribución Costco, uno de los líderes en el sector en Estados Unidos; Bricomart, que aterrizó en 2016, o Amazon, que habilitó justo antes de la pandemia una estación logística, son algunas de las empresas que han revitalizado el entorno, en el que también está prevista la construcción de un hotel y la apertura de dos nuevos establecimientos más de comida rápida.

El parque empresarial suma más de 270.000 metros cuadrados. De ellos, 200.000 están ubicados en terrenos municipales de Sestao, mientras que otros 74.000 pertenecen a Trapagaran.