Los vecinos del barrio barakaldarra de Arrontegi ya cuentan con el segundo acceso mecánico que facilita el tránsito por esta zona de la localidad fabril. Tras la instalación en 2017 de las rampas de Arrontegi, ya es una sólida realidad el ascensor que une la calle Etxatxu y el Grupo San Luis, un proyecto en el que la institución local barakaldarra ha invertido 270.000 euros. “Desde hoy, el tránsito por el barrio es mucho más cómodo para las y los vecinos con movilidad reducida, personas mayores e incluso familias que llevan en carrito a los niños y niñas”, indicó Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo.

Y es que el nuevo ascensor panorámico sirve para salvar un desnivel de 20 metros, una inclinación que, hasta ahora, debía salvarse a través de una hilera de escaleras. La creación de este elevador era un proyecto muy deseado y que estaba previsto que se ejecutase en el año 2020, pero la irrupción de la pandemia obligó a aplazar la materialización de estos trabajos para dar paso a otras prioridades más acuciantes en aquellos delicados momentos como, por ejemplo, atender a todas aquellas familias y negocios que se quedaron en una situación muy complicada a causa de los efectos económicos de la pandemia. Pese al importante desembolso económico que tuvo que realizar el Ayuntamiento de Barakaldo para dar respuesta a aquellas necesidades, la institución local fabril poco después ha podido dar forma a este proyecto en Arrontegi. “La buena salud financiera de nuestro Ayuntamiento, que ahora mismo cuenta con la deuda más baja de su historia, nos ha permitido finalmente impulsar esta obra para mejorar la calidad de vida de los y las vecinas del barrio de Arrontegi”, expuso la primera edil. En concreto, el ascensor panorámico que ya está en funcionamiento tiene unas dimensiones de 110 centímetros por 140 para que cumpla las normas de accesibilidad que están vigentes y cuenta con un doble embarque a 180 grados y que está adosado a una pared. Además, para adaptar el entorno del ascensor a la nueva realidad, se ha trasladado un paso de peatones que se ha colocado frente al elevador con lo que la seguridad en este entorno ha experimentado un importante salto cualitativo. 

La ejecución de este proyecto ha sido muy importante para mejorar la accesibilidad de esta zona de Barakaldo y tendrá un impacto positivo directo en todas aquellas familias que residen en las cerca de 250 viviendas que se alzan en la calle Etxatxu. “De esta manera seguimos avanzando en ese nuevo Barakaldo, donde nuestro objetivo es acabar con los barrios de primera y de segunda, como pasaba en el pasado, acercando a los distintos barrios nuevos servicios y equipamientos que mejoren la calidad de vida de sus vecinas y vecinos”, expresó Del Campo.

Con esta actuación no se cierra el capítulo de construcción de accesos mecánicos en Arrontegi. En este aspecto, a lo largo de los próximos meses se pondrá en marcha el proyecto de instalación de unas rampas en la calle Nafarroa, trabajos con los que se continuará mejorando la accesibilidad del barrio. “Dando respuesta a las últimas peticiones que nos trasladó la asociación de vecinos del barrio en relación a la mejora de la accesibilidad en la calle Nafarroa, se iniciarán en las próximos meses la obra para instalar una nueva rampa mecánica en esa zona”, indicó Del Campo. Con esta actuación futura se seguirán dando pasos adelante en la mejora de la accesibilidad en este barrio fabril que vio cómo hace, justamente, un lustro, se iniciaba el primer proyecto de creación de accesos mecánicos con la creación de unas rampas mecánicas en la calle Rontegi.