La plaza Iturrondo de Galdakao vuelve a estar en el punto de mira por ser el centro neurálgico de la actividad cultural y festiva de la localidad. Durante las pasadas fiestas patronales de septiembre, varios vecinos alzaron la voz para quejarse del alto nivel de ruido y el incumplimiento del horario de cierre de las txosnas allí instaladas. Un mes después de la finalización de los Santakurtzak, vuelve el malestar entre algunos residentes en el entorno por el evento que ha tenido lugar este fin de semana en el interior de la carpa y la preocupación por lo que ocurrirá este viernes y sábado durante la celebración del festival Musika Bizian.

Según relata una afectada, “el viernes a las 19.30 horas ya estaban realizando pruebas de sonido que superaban ampliamente los decibelios legales establecidos, y el acto finalizó sobre las 02.00 horas”. Por la tarde, ante la intensidad de la música, “salí de casa para hablar con los técnicos de sonido y les pedí que bajaran el volumen porque me vibraban los cristales y las ventanas, pero no lo hicieron” y, ante la situación, decidió llamar a la Policía Municipal, pero estas gestiones también fueron infructuosas. “Me indicaron, que ellos no disponen del medidor de ruidos, y que no podían hacer nada, puesto que la organizadora del evento disponía de autorización”. El sábado, la música ya estaba en funcionamiento sobre las 10.00 horas y la actividad en la plaza se extendió “hasta las 4 de la madrugada, y a las 6.45 horas estaban las máquinas limpiadoras en la plaza, así que el descanso fue imposible”, detalla.

Ante esta situación, el domingo se personó en las dependencias de la Policía Local “y la única opción que me dieron es que pusiera una denuncia por lo penal en los juzgados de Bilbao”. Para la afectada, “no es justo que siempre suframos los mismos esta problemática” y entiende que una posible solución podría ser “rotar este tipo de actos y eventos por diferentes espacios públicos del municipio, como hacen en Durango, porque una cosa es decirlo y otra vivirlo, y es insufrible”.

Plaza Iturrondo

Sonido alto

En fiestas. Varios residentes de las viviendas anexas a la plaza ya se quejaron en septiembre de la intensidad del ruido y el incumplimiento del horario de cierre de las txosnas allí instaladas.

Molestias reiteradas. En un evento cultural celebrado este pasado fin de semana parece que se ha repetido la situación. Una afectada asegura que sus persianas y cristales han llegado a vibrar por la intensidad del volumen de la música y nadie acaba de dar una solución a esta problemática.