Abuelos y nietos, unidos por puro amor al arte en Santurtzi
Un mural de 9 metros florece en la residencia municipal de Santurtzi gracias a la labor de internos y niños voluntarios
El arte puede servir para muchas cosas, entre ellas figura el unir generaciones. Así se está demostrando en la residencia de mayores Nuestra Señora de Begoña de Santurtzi, lugar en el que internos de la residencia y niños voluntarios están dando forma y color a un mural aborigen australiano de nueve metros de longitud.
Como ya ha ocurrido en otros puntos de la localidad marinera en los que se han hecho este tipo de murales como, por ejemplo, el instituto Kantauri o uno de los fuertes del Serantes, el encargado de coordinar la obra es Iñigo Urrutia. De este modo, a lo largo de la pasada semana, Urrutia sentó las bases del mural y, desde ayer, los mayores y los más pequeños están poniendo su tiempo y su talento al servicio de la creación de esta obra que dará color a la residencia municipal santurtziarra.
Ayer, tanto mayores como niños empezaron su labor en el mural y ese trabajo se llevará a cabo también hoy, el jueves, y los días 25, 26, 27 y 29 de este mes. Se prevé que ese día 29 de julio se den los retazos finales a esta obra que durante su proceso de creación servirá para unir a personas mayores y a niños.