La directora del Museo Santxotena de Artziniega, Teresa Lafragua, no pudo evitar emocionarse ayer jueves en la sala de exposiciones de la OKE donde ha pergeñado una impactante muestra sobre La mujer en la mineríaen la que plantea un reconocimiento gráfico y escultórico -a través de delicadas figuras de cerámica alfarera y de tela- del papel que la mujer jugó en la minería entre los años 1880 y 1960. Entre ellas una luchadora universal como Dolores Ibarruri -Isidora- Pasionaria, que está presente en la muestra a través de un enorme busto figurativo de casi un metro de alto elaborado en madera de roble por el baztandarra Xabier Santxotena.

"Ya podéis perdonar que me emocione pero aunque soy de Artziniega yo pasé algunos veranos de mi infancia en esta zona con un tío mío que era minero. Además, Pasionaria fue madrina de mi aita y ello hace que tenga un fuerte vínculo emocional con esta zona minera", señalaba con cariño esta mujer que reconoce que la muestra de la OKE es la más completa que ha elaborado hasta ahora sobre la mujer y la minería. "Quiero rendir homenaje al trabajo de la mujer en la minería. La historia de estas mujeres bien lo merece", señaló Teresa, quien denunció que "se trataba de mujeres que realizaban tareas realmente duras, invisibilizadas y hasta denostadas -de manera significativa en el caso de las sirgueras de la ría- en un tiempo en el que no estaba bien vista la presencia femenina en el mundo laboral, relegándolas al trabajo del hogar y la crianza de la prole mientras el hombre era el que llevaba el pan a casa", sostuvo esta pintora reconocida más allá de las fronteras vascas por las exposiciones de belenes que cada año sorprenden a propios y extraños.

La muestra de la OKE se inaugura hoy viernes a las 18.30 horas y se podrá disfrutar hasta el próximo 1 de abril de lunes a viernes de 9.30 a 13.30 y de 16.30 a 21.00 horas. Con esta exposición se pretende dar a conocer el papel tan relevante que tuvieron las mujeres en la vida laboral minera y en ella se pueden contemplar -tanto a través de fotografías como de composiciones hechas con figuras de alfarerías y tela- escenas cotidianas donde aparecen trabajando en diferentes actividades. Desde el hogar una vez acabada la jornada laboral donde la mujer debía atender a los miembros de la familia -en algunos casos incluso hasta pupilos temporeros que trabajaban en las minas- sin olvidar que la tarea que no habían acabado en la mina debía completarse en casa. "Las cartucheras que preparaban la dinamita tenían cupos de más de 1.500 cartuchos al día y si no los finalizaban tenían que continuar elaborándolos en sus casas con la ayuda de la familia", recuerda Lafragua, quien destacó que hay oficios que son bien conocidos como el de las chirteras, las mujeres que se encargaban de lavar el mineral para eliminar la chirta, "cuyo trabajo era de pie y estaban todo el día en contacto con agua y en el que ni siquiera se les permitía hablar o cantar". Sin embargo, reseñó, hay otras encomiendas menos visibilizadas "como el picado del mineral que se hacía de sol a sol o el de las cargueras que llevaban el mineral hasta los vagones con cestos en la cabeza con más de 20 kg".

Además de cerca de medio centenar de fotografías, la exposición de la OKE -dotada con códigos QR para posibilitar un conocimiento más detallado de la muestra- acoge cinco escenarios con figuras de cerámica y de tela que "en todos los casos han sido realizados por mujeres", desveló Lafragua.