El último dispositivo especial de la pandemia de covid- 19 desparece esta semana. Se desmantela así la unidad residencial sociosanitaria especializada en la atención a personas mayores con covid-19, puesta en marcha por IMQ Igurco, con la coordinación de Osakidetza-Servicio Vasco de Salud y la Diputación de Bizkaia que ha atendido en un año un total de 272 personas. Se trata de un recurso asistencial intermedio, entre las residencias de personas mayores y el Hospital, dispuesto inicialmente para pacientes residenciales con covid-19 moderado o grave, pero que no requiriesen su ingreso en un hospital.

En Bizkaia se habilitaron dos unidades de este tipo, la de Birjinetxe, en Bilbao, que cerró su unidad especial para Covid-19 en marzoen marzo, y la ubicada en uno de los módulos de la residencia Imq Igurco Unbe, de Erandio.

Esta apuesta asistencial, dotada de enfermería las 24 horas del día, médico geriatra, atención psicológica y telerrehabilitación, se ha demostrado altamente eficaz, tal y como demuestran sus datos y el desarrollo posterior de dispositivos similares en otras Comunidades Autónomas. Tanto es así que los datos de la unidad residencial sociosanitaria especializada en la atención a personas mayores con covid-19 de Unbe se exponen del 2 al 4 de junio en el II Congreso Virtual de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), con el fin de compartir la experiencia de esta nueva buena práctica asistencial.

Tal y como explica la Dra. Naiara Fernández, directora Asistencial de IMQ Igurco, «desde abril de 2020 a abril de 2021 ingresaron en la unidad 272 pacientes, (49% hombres y el 51% mujeres) con una edad media de 75 años (el 80% eran personas mayores de 75 años). En cuanto a su situación funcional al ingreso, la mayoría presentaban una dependencia severa para actividades básicas de la vida diaria, con una prevalencia de demencia del 63%. Las estancias medias fueron de 21 días en el periodo de abril a diciembre de 2020 y de poco más de 16 días en el intervalo entre enero y abril de 2021».

La unidad residencial sociosanitaria especializada en la atención a personas mayores con covid-19 de IMQ Igurco Unbe «ha demostrado ser un recurso eficaz y seguro para la atención de personas institucionalizadas afectadas por covid-19, consiguiendo una letalidad inferior a la evidenciada en ámbito residencial (un 12,7% en la unidad frente al 21% registrado de media en residencias en toda España) y con una incidencia de úlceras por presión inferior al estándar hospitalario (un 5,16% frente al 7,87%). Asimismo, la valoración por un médico geriatra aseguró la optimización de la prescripción farmacológica de personas mayores institucionalizadas, rebajando en unos porcentajes relevantes la prescripción de medicamentos psicótropos, neurolépticos y benzodiacepinas».

Además de lo anterior, «ninguno de los profesionales que trabajaron en la unidad se han contagiado con el coronavirus». Según destaca la geriatra, «a pesar de las circunstancias, el esfuerzo conjunto de todo el equipo ha hecho posible en esta unidad aspectos como el haber desarrollado con la Universidad del País Vasco un programa de telerrehabilitación pionero, el proporcionar asistencia psicológica a las familias y a los residentes, el mantenimiento de las distintas actividades (incluida la terapia ocupacional) y la necesaria actividad sociocultural que da vida y anima el día a día de las y los residentes».