La posibilidad de cerrar el espacio aéreo en el Estado anunciada por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el pasado martes va camino de convertirse en realidad sin que el Gobierno tenga que firmar el decreto que lo avale de forma oficial.

Grande-Marlaska indicó que la decisión de cerrojazo en el espacio aéreo es algo que debe decidir la Unión Europea (UE) pero después de la activación ayer del blindaje de las fronteras terrestres de toda Europa, la clausura de las autopistas aéreas es perfectamente factible, a excepción de vuelos sanitarios y de extrema necesidad.

El goteo diario de cancelaciones de rutas entre las capitales europeas que conectan con los aeropuertos de la península y las islas, y de los vuelos domésticos dentro del Estado despeja el cielo de aviones de forma espectacular. Y todos los aeropuertos padecen las consecuencias, incluido el de Bilbao.

Los avisos continuos de suspensión de rutas llevó ayer a Aena a no facilitar datos sobre la reducción de las operaciones en La Paloma, pero un recuento de los vuelos previstos para ayer y los anuncios de cancelaciones de las aerolíneas permiten afirmar que prácticamente más de la mitad del panel de vuelos de la terminal de Loiu estuvo apagado.

En concreto, si en un miércoles de operativa habitual el aeropuerto de Bilbao registra una media de 130 vuelos, durante la jornada de ayer en la página web de Aena, figuró que la terminal de Loiu tenía previsto gestionar 55 vuelos de distintos destinos nacionales e internacionales, de los cuales catorce anunciaron su cancelación al mediodía.

En concreto, fueron suspendidas las rutas con destino a Bruselas, Málaga, Múnich, Estambul, Lisboa, París y Sevilla. Sí despegaron los enlaces con Madrid, Barcelona, Londres, Fráncfort, Ámsterdam, Róterdam y Düsseldorf y se redujeron los enlaces con París y con los aeropuertos de las islas Baleares y Canarias.

La obligación que tiene la ciudadanía de quedarse en casa y la proliferación continua de la pandemia del covid-19 por todo el continente augura que la perdida de vuelos continuará sin remisión.

Ignacio Casas, gerente de Bilbao Air, la sociedad para la promoción del aeropuerto de Loiu, indicó a DEIA que “esta semana las conexiones de Iberia con Madrid se han reducido a 19 y para la semana que viene tienen una previsión de doce conexiones”. Tan solo dos conexiones diarias en jornada laborable con la capital del Estado, cuando los enlaces habituales superan las ocho diarios en tiempos de normalidad.

Casas calificó la situación generada como “un tsunami para el sector del que todavía no sabemos a qué nivel va a llegar”. La orden del Gobierno redujo al 50% unos vuelos que a las aerolíneas no les merece la pena mantener ante la escasez de clientes. “Un avión parado cuesta mucho dinero a las compañías, pero un avión en vuelo casi vacío es una sangría”, reconoció el experto en el sector aeronáutico. Son los bautizados como vuelos fantasma, lastrados por la reducción de las rutas y por el hecho de que en el interior de cada aeronave se tiene que dejar la distancia de seguridad sanitaria entre los pasajeros .

La cada vez mayor escasez de vuelos y sus altos precios dejan tirados por aeropuertos de todo el mundo a miles de españoles y unos cuantos cientos de vascos.

El Gobierno vasco dio ayer a conocer que activó todas sus delegaciones en el extranjero para que presten ayuda a las personas que se vean atrapadas por el cierre de fronteras.

Marian Elorza, secretaria general de Acción Exterior, indicó ayer que “estamos tratando de facilitar una labor de puente” entre los vascos que se han quedado bloqueados en el extranjero y las embajadas y consulados competentes en la materia.

Casos concretos son el medio centenar de vascos atrapados en varios países -sobre todo en Perú, Filipinas y Malta-, aunque Elorza se felicitó porque en las últimas horas el gobierno peruano hizo pública su voluntad de dejar salir del país a todos los extranjeros.

La secretaria general de Acción Exterior calificó la situación como “muy complicada”, lo que generó el cierre de fronteras y la suspensión de vuelos. Elorza añadió que es consciente de la sensación de “angustia y ansiedad” que provoca esta situación, por lo que tratará de asesorar a los afectados sobre las diversas alternativas que existen.

Restricciones. El ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana restringió el tránsito aéreo en el Estado al 50% de las rutas que habitualmente presta la red de aeropuertos de Aena.

Operativa de las compañías. A las restricciones obligadas por mandato de los gobiernos, las propias aerolíneas también cancelan rutas ante la escasa demanda de una población enclaustrada en casa y las pérdidas económicas que suponen mover aviones casi vacíos.