eSTE siglo apura los últimos días de su segunda década, pero hay un puesto dentro de la feria del Stock Euskadi, el de la tienda gasteiztarra de moda femenina Chicas, en el que han viajado en el tiempo casi veinte años atrás. No es que la ropa que se vende en Chicas no sea de la última moda, ni mucho menos, sino que esas compras de prendas de ropa se pueden pagar con pesetas. Los billetes de 1.000, 2.000 y 5.000 y las monedas de 500, 200 y 100 pesetas sirven, hasta mañana, para abonar las compras de unos artículos rebajados que le saldrán a los clientes, auténticamente, por cuatro duros.

El ideador de esta iniciativa es Rubén Samperio, responsable del comercio alavés que ya ha tomado parte en acciones similares como miembro de la Asociación de la calle Gorbea de la ciudad gasteiztarra. “Hace tiempo escuché que había una gran cantidad de pesetas aún en los hogares y, tomando como referencia las acciones que habíamos hecho en Gasteiz, decidí trasladar esta iniciativa a Stock Euskadi”, asegura Samperio.

Han pasado casi dos décadas desde que las pesetas dejaron de estar en circulación y, por ello, parte de los visitantes a esta feria nunca han pagado con esta moneda, por lo que, lo que para unos será volver a recordar y revivir una época, para otros será una pequeña clase de Historia. “Es como una pequeña vuelta al pasado y se crea un ambiente muy bonito a la hora de hacer las compras”, señala Samperio.

Así que, a lo largo de este fin de semana, abuelos, padres y nietos podrán compartir experiencias mientras hacen sus compras en este puesto de la feria del Stock Euskadi. Muchos de ellos acudirán al puesto atraídos por los descuentos porque ya saben... la pela es la pela.