Getxo - El diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, anunció ayer que los trabajos para completar el estudio informativo del túnel bajo la ría incluirán una decena de sondeos en Eskuinaldea, que tomarán el relevo a los realizados en el cauce fluvial desde finales del año pasado, con el fin de dibujar el trazado de la futura alternativa a Rontegi.

Rementeria reconoció que “hace unos meses hicimos las primeras catas en la ría para ver cómo era el fondo y por dónde podía ir el túnel. Hicimos diez catas de hasta 54 metros de profundidad”. El diputado general ahondó en que “para hacer un túnel submarino el material ideal es la roca, y nos hemos encontrado que la roca está en la zona de la dársena de Lamiako, no en la zona de Getxo. Es roca de calidad y está a una profundidad adecuada”.

Estos sondeos, según desveló el propio Rementeria, comenzarán “la próxima semana. Vamos a empezar con las catas en tierra. Sabemos qué hay bajo el agua y ahora tenemos que saber qué hay en las orillas”. El máximo responsable de la institución foral desveló que “tenemos previstas diez catas, aunque los técnicos dicen que con cinco o seis bastarán. En función de esas catas podremos dibujar el trazado definitivo, pero con una cosa clara: ese túnel empezará en Artaza y saldrá en la rotonda de Ballonti”.

Rementeria realizó estas declaraciones en un encuentro con vecinos de Getxo, a los que reconoció que “uno de los nudos que tenemos que soltar en nuestra red es La Avanzada y Rontegi. Necesitamos una alternativa. Y el túnel va a ser mucho más. Junto a la segunda fase de la Supersur, va a ser la gran variante de Bizkaia”.

Estos dos proyectos que afronta la Diputación Foral de Bizkaia supondrán una inversión global de 580 millones de euros. El primero que entraría en funcionamiento sería el de la Supersur, cuyas obras comenzaron en enero y tienen prevista su conclusión para 2023, mientras que el del túnel, que sería utilizado por unos 53.000 vehículos diarios, deberá esperar hasta 2027. - DEIA