Karrantza - Karrantza es tan grande que su atractivo no termina en la cueva de Pozalagua y el museo Dolomitas. En este sentido, el valle ultima un plan de acción del paisaje que reforzará la conexión entre los dos barrios principales, recuperando una antigua senda fluvial que tendrá continuidad hasta la iglesia de Ahedo. Las conclusiones del proyecto, redactado por el máster del paisaje de la Universidad del País Vasco y las empresas de ingeniería Ingune e Ingeotyc con financiación del Gobierno vasco y colaboración del Ayuntamiento, se presentaron a la ciudadanía la pasada semana.

Se trata de que los itinerarios desde la zona de Ambasaguas, donde se encuentran la estación del tren y el museo de Dolomitas y Concha no finalicen en el entorno del edificio consistorial, sino que se prolonguen hacia otros núcleos menos poblados, pero también con encanto. “Queremos habilitar la margen izquierda del río Mayor como servidumbre pública y de conexión peatonal y ciclista, tanto para los vecinos como para los turistas y poner en valor el patrimonio del entorno”, explican. El trazado proseguiría hasta Ahedo, “que presenta patrimonio de gran interés y una amplia panorámica, en la que se pueden ubicar los principales elementos culturales y naturales del valle: bosques de hayas, los montes de Ordunte, el desfiladero de Ventalaperra, la peña de Ranero -donde se enclavan Pozalagua y la torca del Carlista- o el parque natural de Armañon”, enumeran. Allí un panel informativo señalizará lo más destacado de las vistas.

Campos de trabajo El plan de acción del paisaje implica la regeneración de la margen izquierda del río Mayo en lo tocante a la gestión de los residuos, la inclusión de la senda del río Carranza y el circuito de Ahedo, que así se llamará el nuevo itinerario, en documentación y herramientas digitales del Ayuntamiento y la Diputación Foral de Bizkaia, la organización de campos de trabajo para implicar a los vecinos, la eliminación de especies invasoras y plantación de otras autóctonas y puesta en marcha de actividades deportivas y culturales para dar a conocer el circuito.

En Ahedo, se efectuará un estudio arqueológico del área donde se asienta la iglesia de San Miguel, erigida en el siglo XVII, y se procederá a adecentar los elementos históricos para contextualizarlos en relación a los alrededores en los soportes que contendrán la información sobre el paisaje.

El contenido del programa dinamizador, que ha contado con un proceso de participación ciudadana, se incorporará, asimismo, al plan general de ordenación urbana, de modo que futuras actuaciones lo tengan en cuenta. Además, se trabajará para convertir a Karrantza en referencia de integración de naturaleza e historia.