Güeñes - El Ayuntamiento de Güeñes quería acometer la obra en la temporada de verano, cuando los vecinos disponen de la piscina al aire libre, pero no se podía esperar más. El “deterioro progresivo” de la cubierta de la piscina climatizada del complejo polideportivo de Sodupe menos de diez años después de su inauguración urgía actuar cuanto antes, así que la instalación permanece cerrada por seguridad hasta que se complete la reforma. Un juzgado ha condenado a los arquitectos que diseñaron y dirigieron la construcción a abonar al Ayuntamiento 162.000 euros para subsanar los fallos que presenta la estructura.

La situación “aconseja no abrir en estos momentos e iniciar cuanto antes los trámites para renovar la cubierta cuanto antes: elaboración de un proyecto de obra, adjudicación y ejecución de los trabajos”, según ha trasladado el Consistorio a la ciudadanía por medio de los canales de comunicación municipales. “Era intención” de la administración local “esperar a los meses del próximo verano para causar el menor perjuicio a las actividades que se desarrollan en la piscina”, pero se ha optado por intervenir lo antes posible.

El Ayuntamiento de Güeñes devolverá a los socios la parte de los abonos correspondiente al tiempo en el que no hayan podido utilizar la piscina y el gimnasio -en este caso, debido a la renuncia de Basori S.L, la adjudicataria de cultura, deporte y juventud a seguir prestando los servicios desde el 30 de septiembre y la huelga indefinida iniciada el lunes por 35 trabajadores-. Las devoluciones se llevarán a cabo “en cuanto se restablezcan los servicios o al concluir el periodo de vigencia de los carnés”. - E. Castresana