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Fusión de flamenco y euskera por El Nazareno

El cantaor bilbaino Juanjo Navas interpretará el lunes dos saetas escritas por Arginzoniz en la procesión de Las Cortes

Fusión de flamenco y euskera por El Nazareno

Tienen la misma edad, 43 años, y el mismo amor por el flamenco, aunque llegaron a él por distintos caminos. Juan Navas siempre escuchó cante jondo en su casa, sobre todo por boca de su abuelo, natural de Baena, Córdoba, que era un gran cantaor aficionado. Beñat Arginzoniz, por su parte, se quedó enganchado al flamenco por culpa de una novia que le llevó a vivir a Granada. “Desde entonces no he dejado de escuchar”, dice el escritor bilbaino. Ambos se conocen desde hace muchos años, tantos que ni se acuerdan. Esa amistad y el gusto por el flamenco les llevó el pasado mes de noviembre a editar un disco-libro titulado Reflejos de Andalucía, que está teniendo bastante éxito. Ahora han vuelto a unir sus talentos para protagonizar una experiencia única en la Semana Santa bilbaina. El próximo lunes, Juanjo le cantará saetas en euskera escritas por Beñat al Nazareno durante la tradicional procesión que recorre Las Cortes y San Francisco. Ambos están convencidos de que “va a quedar muy bonito”.

Esta curiosa idea surgió hace meses en BilbaoHistoriko, una organización que promueve acciones para promocionar los barrios históricos de la capital vizcaina. “Me llamaron”, dice Beñat, “para ver qué me parecía y si conocía a algún cantaor, ya que quieren instaurar esta nueva tradición de aquí en adelante”. A continuación se puso en contacto con su amigo Juanjo, que “se animó”. El siguiente paso de Beñat fue escribir dos saetas en euskera para que pueda interpretarlas Juanjo sin mayores problemas el lunes. “La saeta”, explica Beñat, “es una expresión espontánea de generosidad que se hace al momento, pero en este caso las he elaborado. Una de ellas está dedicada a la Virgen de la Magdalena y la otra al Cristo de Medinaceli. En esta última hablo de la droga y de la gente que ha muerto en el barrio por su culpa; digo que al pasar por la calle me dan ganas de llorar por los jóvenes que han muerto”.

La saeta traducida al euskera será cantada por Juanjo desde el balcón del mítico club El Edén. “Me ha costado un poco porque yo no soy vascoparlante, aunque tengo hecho el oído porque mis hijos estudian en euskera, pero hay que darle el giro al flamenco”.

Música El cantaor bilbaino interpretará las saetas con música de Fosforito. Juanjo está convencido de que “va a quedar bonito”. Esa es la impresión que tiene tras los ensayos realizados. Además señala que “si no fuera a quedar bien no me habría animado a hacerlo”.

Beñat, por su parte, también está convencido de que la experiencia va a ser muy positiva. “A mí me gusta cómo queda”, dice, que lo compara con “un canto árabe, una cosa muy bonita”. Ahora solo falta que el lunes dé una tregua el tiempo y Juanjo, al igual que el resto de saeteros, pueda cantarle al Nazareno. “Yo no estoy nervioso”, dice Juanjo, aunque reconoce que “me produce un poco de responsabilidad”. Lo que está claro es que va a ser una experiencia única. Mientras llega el día, tanto Juanjo como Beñat siguen con su ocupaciones profesionales. Juanjo es barrendero y Beñat trabaja en una librería. Pero también con sus hobbies. Juanjo actúa el sábado en el Gran Casino y Beñat ya piensa en otros libros tras publicar recientemente uno sobre Camarón.