“La idea surgió en un viaje; hoy empleamos a cien personas”
Los premios On Bizkaia reconocen su contribución a la economía a siete pymes
Bilbao - Han conseguido multiplicar por nueve su volumen de negocio en apenas un año, abrir fronteras y llegar a mercados tan lejanos como Japón o Singapur, hacer frente a los nuevos tiempos diseñando productos que se adapten a las necesidades del mercado... Según su definición son pequeñas, pero estas pymes vizcainas han demostrado ser muy grandes. La Diputación entregó ayer los premios On Bizkaia, destacando a aquellas que han tenido mayor impacto y reconociendo su contribución a la generación de actividad económica y empleo en el territorio.
A lo largo de sus siete ediciones, estos galardones reconocen a aquellas pymes vizcainas que han destacado en ámbitos como la innovación, la internacionalización, la trayectoria o el emprendimiento. Prosertek, PQC, Lookiero, Sophie et voilà, la Fundación Solidarters, Batz Energy y Efeuve han sido los premiados este año, entre los más de 466 proyectos empresariales gestionados por el departamento foral de Desarrollo Económico y Territorial a través de los programas de Beaz.
Oier Urrutia volvía con su pareja del Cabo de Gata en coche cuando una bombilla se le iluminó en la cabeza. Fue una conversación aparentemente trivial pero ahí surgió la semilla de Lookiero, una empresa que ofrece un servicio de personal shopper a través de Internet. “Me contó que para sus amigas, que empezaban a tener hijos, ir a comprar ropa se había convertido en una pesadilla”, relató el director general de la plataforma, premio Proyecto de Creación de Empresas. Siempre había querido emprender, por lo que, una vez finalizado su periodo de formación, puso en marcha su empresa: a través de una plataforma, las clientas detallan sus gustos, medidas y presupuesto, y realizan un pedido. En unos días reciben en su casa una caja con cinco prendas y fichas con diferentes combinaciones; se quedan lo que quieren y lo que no, lo devuelven. Sus logros en apenas un año -se lanzó en 2016- son de escándalo: han multiplicado por nueve su volumen de ventas, y han pasado de emplear 16 a 100 personas. En los próximos meses realizarán el salto a Reino Unido, tras afianzarse en los mercados estatal y francés. “Lo que nos hace diferentes es la personalización; dicen que los únicos modelos que van a sobrevivir a gigantes como Amazon son los que aportan valor añadido a los clientes”, explicaba tras recoger el premio.
Prosertek se creó en Santurtzi hace años 26 años. En un principio producían protectores de caucho para puertos en una pabellón de Gallarta; hoy en día se dedican a fabricar pasarelas de embarque para cruceros. Premio Proyecto de Innovación, han sido los primeros en comercializar un modelo que permite los embarques y desembarques incluso en condiciones meteorológicas adversas. Ya se utiliza en Bilbao o Tenerife, y ahora quieren llegar a otros destinos turísticos como Qatar o Emiratos Árabes Unidos. “La innovación es una necesidad, como en todas las empresas, y la aplicamos en todos los ámbitos”, explicaba su director general, Ricardo Hernani. “En nuestra empresa hay personas que llevan con nosotros desde el principio y han tenido que reinventarse día a día. En productos no vendemos los mismos que hace dos décadas, y en mercados, una empresa que empezó vendiendo en el Estado hoy en día vende dos terceras partes en mercados que antes eran impensables”.
Sofía Arribas y Saioa Goitia venden los primorosos vestidos de novia que confeccionan en su taller de Bilbao en mercados tan lejanos y dispares como Estados Unidos, Japón, Singapur o Suiza. En apenas dos años se han convertido en sinónimo de elegancia en todo el mundo y exportan casi la mitad de su producción, en un mercado que parecía estancado y al que querían aportar algo singular. En su primer año de vida no solo han vencido todas las dificultades que supone poner en marcha una nueva empresa, sino que han lanzado su propia colección y se han abierto al mundo. “Queremos alcanzar el 70% de la exportación y para ello queremos llegar al mercado asiático”, explicaban tras recoger el premio Bizkaia Creativa.
Jordi Albareda y Saioa Eibar, impulsores del Fair Saturday, recibieron muchos noes a su novedosa iniciativa. ¿Quién iba a creer en un movimiento que pretendía convertir el sábado después del Black Friday, la jornada más consumista del año, en el día para apoyar causas sociales a través de eventos culturales? “Y sin rebajas de precios”, bromeaba al recibir el premio Emprendimiento e Innovación Social. Hasta que alguien le dijo sí. Hoy en día, su Fair Saturday es una realidad en 112 ciudades de todo el mundo. Miles de artistas y entidades culturales actúan y apoyan ese día a través de su evento a un proyecto social de su elección. El año pasado recaudaron más de 190.000 euros para 215 iniciativas. Escocia se sumará este año a la iniciativa. “Lo más difícil fue creer en el proyecto, que rayaba lo imposible. Seguiremos trabajando, con mucha humildad, convencidos de que es posible”, reconocían.