BILBAO. El joven conductor se encontraba en paradero desconocido desde el día del atropello al haber abandonado su domicilio de Bilbao. El pasado viernes se presentó en las dependencias policiales de Miribilla con su abogado para que la policía le tomase declaración, quien le tenía identificado desde el tercer día al localizar los vehículos implicados en el atropello.

El grave atropello ocurrió a las 08:30 horas del 25 de diciembre cuando un BMW negro atropelló a dos jóvenes de 33 y 23 años, en la calle Telleria, en el Polígono Santa Ana de Bolueta. Otro vehículo, un Open Astra gris también se vio implicado en el atropello y ambos se dieron a la fuga sin prestar auxilio a las víctimas.

La Policía Municipal de Bilbao destinó a un equipo de trabajo dedicado de manera intensiva a la localización de los vehículos y personas implicadas en el atropello. En el propio lugar de los hechos, los agentes encargados de la investigación del accidente recogieron diversos indicios que facilitarían el esclarecimiento de los hechos.

Los dos vehículos fueron localizados 3 días después trasladándolos a las dependencias de la Comisaría de Miribilla para ser sometidos a una inspección ocular.

Los restos localizados en el lugar que pertenecían al vehículo BMW que había producido el atropello indicaban que tenía la luna trasera fracturada y los cristales de las luminarias traseras rotos así como otras evidencias de importancia para la investigación.

Una vez realizadas las primeras indagaciones se establecieron canales de coordinación y comunicación con el resto de cuerpos policiales facilitándoles por los conductos oficiales todos aquellos datos que podían permitir la identificación tanto de los vehículos como la de algunas de las personas implicadas. Las pesquisas policiales llevaron a la identificación de los conductores.

Cinco días después del atropello, se tomó declaración a todas las personas que podían estar, de alguna manera, implicadas en el caso, excepto al conductor del BMW, que estaba identificado, pero que había huido y se encontraba en paradero desconocido. Las investigaciones policiales han hecho que el joven decidiera acudir con su abogado a declarar a las instalaciones de Miribilla.

Tras su declaración, se ha imputado al conductor de un delito contra la seguridad vial de conducción temeraria, con resultado de lesiones graves y se da por esclarecidos los hechos.