LA idea se le ocurrió a su socio, en la ciudad de San Francisco, tras preguntarle a un taxista por un restaurante italiano no muy caro donde se comiera bien. “Le dijo que no tenía ni idea porque no era de allí. Cogió el móvil, pero hay un maremágnum de información: este no tiene buena pinta, este sí, pero parece caro... Cuando tienes un amigo en la ciudad, le preguntas: Oye, ¿dónde puedo ir a comer? Así que decidimos crear una plataforma para conectarse con personas locales y preguntarles directamente por un restaurante, un sitio de compras, dónde hacer fotos... Sería como tener ese amigo en la ciudad”, explica Rubén López, ingeniero informático que ha ganado con este proyecto, bautizado con el nombre de Knowlii, la primera fase del concurso Go App Bilbao. Un certamen, impulsado por Google y el Ayuntamiento de la capital vizcaina, cuyo objetivo es fomentar la creación y desarrollo de aplicaciones móviles que ayuden a mejorar la experiencia de los turistas en la villa.

Rubén, que recogió el premio, de 5.000 euros, durante un acto celebrado el pasado miércoles en Azkuna Zentroa, explica que su empresa ideó la aplicación para las grandes ciudades, como Londres, donde ya está en marcha, y que decidieron crear la versión bilbaina para presentarse al certamen. “Encajaba con la idea que teníamos del turismo y de cómo usarlo y hasta aquí hemos llegado, de momento”, precisa, ya que ahora se inicia una segunda fase del concurso, donde los 15 participantes deberán desarrollar sus prototipos y se valorará la información que aporten estas aplicaciones sobre el turismo en Bilbao. “Con nuestra plataforma, por un lado, podemos detectar qué buscan los visitantes, y, por otro, estos pueden dejar sus opiniones: Me ha gustado este evento, pero el transporte no ha llegado bien. Estos datos pueden ayudar a mejorar la ciudad”, comenta.

El propio Rubén, que en abril estuvo en Miami, echó de menos una aplicación como la suya. “Quisimos vivir un poco la ciudad, la diversión... Preguntamos a alguien en la calle y nos llevó a un sitio que no nos gustó. Luego preguntamos a otra persona y nos llevó a otro sitio. Estuvimos hora y media buscando un lugar interesante donde comer. Acabamos en una pizzería pequeña, pero con unas pizzas muy buenas. Pensé: Qué pena que no tenemos implantado un Knowlii en Miami. Nos habría venido perfecto”.

Aún es solo un prototipo, pero la plataforma de Bilbao, una vez que el usuario se registra, ofrece la posibilidad de realizar consultas sobre bares, restaurantes, clubs, tiendas, transportes y cultura, pero también sobre “esos sitios mágicos” que hay en las ciudades y solo los autóctonos conocen, como “un restaurante en una esquina o un lugar desde donde ver el atardecer”. “En un futuro queremos meter también eventos, porque la Oktoberfest, por ejemplo, es raro que la conozcas si no eres de Bilbao”, apunta Rubén, quien echa mano de un ejemplo para explicar su uso. “Seleccionas restaurantes, indicas que sea vegetariano, sin gluten, chino... y dices para cuándo lo necesitas: ahora, para dentro de una semana o un viaje que vas a hacer. Envías la petición y esta pasaría a los expertos, que pueden ser desde un profesional del sector a un ciudadano de a pie o un estudiante”, detalla. Los que saben responder a la consulta, la aceptan y es el turista el que, basándose en su perfil, elige con cuál de ellos quiere chatear. “Del experto te viene una descripción, la edad -que es importante, porque no vas a preguntar a una persona de 50 años por dónde salir de fiesta si eres joven-, los idiomas que habla y los chats que ya ha tenido”, describe.

“Ganas un dinero por contestar” Dado que “nadie da su tiempo gratis”, han creado un sistema de propinas. “La primera consulta es gratis y, a partir de ahí, por cada petición hay que pagar un mínimo de 1,5 euros”, señala y añade que “es una forma de ayudar al visitante y de potenciar la economía local. Estás ganando un dinero extra por contestar algo que sabes desde tu casa, la universidad... Es útil para las dos partes”, subraya.

Para que nadie se haga pasar por experto sin serlo -“también tiene ese peligro”, reconoce-, estos no cobran hasta que logran un número determinado de peticiones. “Yo me registro como experto, respondo gratis, y si los usuarios me dan una buena valoración y hago un buen trabajo, empiezo a cobrar. Con esto nos aseguramos de que el visitante tenga una calidad”, pone en valor.

En esta segunda fase de desarrollo, se plantean conectar la plataforma con toda la información disponible sobre los transportes y otros servicios en Bilbao e incluso incorporar un perfil de la propia oficina de turismo, para que el usuario demande en tiempo real la información que necesite sin necesidad de desplazarse físicamente ni descolgar el teléfono. También tienen pensado aderezar la aplicación con una pizca de inteligencia artificial, de forma que se le propongan al visitante los expertos más afines a sus gustos. Una serie de mejoras de las que aún no se sabe si llegarán a beneficiarse algún día los visitantes de Bilbao. “Todavía no hemos decidido si sacaremos esta aplicación por nuestra cuenta. Si tenemos apoyo de las instituciones, le daremos más prioridad”, afirma.

De poder descargarse en un futuro la app en su versión bilbaina, podría generarse además un flujo de información entre esta y la de Londres. “A los visitantes que han pedido ver un concierto de Iron Maiden en Londres podemos informarles del BBK Live. Es una forma de potenciar el turismo entre ciudades”, señala Rubén, que compartirá el premio con sus compañeros de equipo.