BILBAO. El director de la Policía Municipal de Bilbao, Adolfo Alustiza, ha explicado hoy el dispositivo especial de seguridad coordinado con la Ertzaintza que se desplegará con motivo de la Aste Nagusia 2017 para garantizar la seguridad del millón y medio de personas que se prevé acudan a lo largo de los nueve días de fiesta.
El responsable policial ha estado acompañado de otras autoridades locales de Bilbao (Inés Ibáñez, concejala adjunta de Movilidad; Yolanda Díez, edil de Salud y Consumo; Andoni Oleagordía, director de Protección Civil y Emergencias; y Pedro Izaga, subdirector de Calidad de Vida y Sostenibilidad), que han detallado el resto del operativo especial de movilidad, transporte público y limpieza programado para la semana de fiesta.
Los preparativos comenzarán a notarse a partir de mañana, cuando se aplicarán las primeras restricciones de tráfico para facilitar la entrada de camiones y descarga de material en el recinto festivo, lo que obligará al traslado de la parada de Bilbobus de la calle Viuda de Epalza.
En materia de seguridad, el dispositivo incidirá especialmente en actuar contra las agresiones sexistas, según los responsables municipales, que han vuelto a instar a la "tolerancia cero" hacia actitudes machistas y han emplazado a quien sea testigo de una agresión a denunciar los hechos.
La labor de los agentes policiales se centrará, asimismo, en controlar la venta ambulante ilegal -también la de alimentos perecederos-, que no cuente con autorización u ocupe espacio público que afecte a las vías de evacuación.
También se reforzarán los controles de alcoholemia y consumo de drogas entre los conductores. La Policía Municipal ha planificado 23 controles en 18 puntos de la ciudad, que se sumarán a los de la Ertzaintza en los accesos a la Villa.
El responsable de la Policía Municipal ha explicado que se ha previsto un sistema de denuncia simplificado para pequeños delitos -fundamentalmente hurtos- para agilizar trámites.
Asimismo, como novedad este año se pondrá en marcha un nuevo servicio extraordinario de "objetos perdidos y hallazgos" en fiestas para procurar la devolución de estos objetos lo antes posible -entre 1.000 y 1.500 objetos perdidos se contabilizaron la pasada Semana Grande-.
Por otra parte, el recinto festivo contará, en la trasera de la estación de Abando, con un puesto médico avanzado para atender emergencias sanitarias y también se ubicarán ambulancias en zonas de conciertos, barracas y otras áreas.
Asimismo, estará preparada la embarcación de rescate acuático del Ayuntamiento de Bilbao y un retén de submarinistas durante los conciertos en Abandoibarra.
En la ría se habilitará un canal de servicio de emergencias que no podrá ser utilizado por embarcaciones, por ejemplo, durante los fuegos artificiales, el espectáculo más multitudinario de la Aste Nagusia.
Los responsables municipales han considerado como zonas menos aconsejadas para verlos los puentes del Arenal, del Ayuntamiento y Zubizuri, entre otras razones, porque en caso de avalancha las únicas vías de escape son las entradas y salidas a los puentes.
Según han recordado, el reglamento de artículos pirotécnicos obliga a suspender los fuegos artificiales si el viento supera la velocidad de 36 kms/hora (antes era con 54 kms/hora), con lo que existe una pequeña posibilidad de que suceda. En tal caso, el Ayuntamiento ha organizado un dispositivo para avisar a la ciudadanía de que se suspende el espectáculo.
Por su parte, un dispositivo compuesto por 264 personas y 117 vehículos y máquinas garantizarán durante las fiestas que el centro festivo de la Villa se mantenga limpio.
Los responsables municipales han vuelto a abogar, en este sentido, por un inicio de fiestas y un "txupin" limpio.
Como en años anteriores, las fiestas provocarán en el recinto festivo afecciones en el tráfico rodado, que permanecerá totalmente cortado desde las 8.00 horas del jueves 17 de agosto hasta las 15.00 horas del día 29 en las calles Sendeja, Viuda de Epalza, Arenal y Ribera.
Asimismo, 18 líneas de Bilbobus verán afectado su recorrido y, como novedad, este año el funicular de Artxanda ampliará su horario de funcionamiento hasta medianoche entre los días 19 y 26 de agosto.
Además, el área de Salud y Consumo controlará el buen estado de bebidas y alimentos que se distribuyan en las txosnas y otros locales del recinto festivo.
Según los datos facilitados por el Ayuntamiento, la Aste Nagusia bilbaina supuso en 2016 un gasto de 77,2 millones de euros en Euskadi, generando 80 millones de euros de PIB y el mantenimiento de 1.447 empleos.