Bilbao - Las tradicionales zarzuelas que anualmente se celebran en Aste Nagusia presentaron ayer la obra de esta edición que, un año más cuenta con la colaboración de DEIA. Este año el Palacio Euskalduna acogerá una nueva producción de una de las obras más conocidas del género chico, El caserío, del afamado compositor gasteiztarra e hijo adoptivo de la villa Jesús Guridi.
La obra se representará en tres funciones, los días 19, 20 y 21 de agosto. Esta producción contará con la compañía de danza Elai Alai, que además de participar en las funciones colaborará en las romerías y fiestas vascas que se organizarán antes de cada función. La dirección correrá a cargo de Humberto Fernández, que con Tulio Gagliardo al frente del apartado musical dirigirán a artistas de primera fila como el tenor santanderino Julio Morales o la soprano toledana Hevilla Cardeña. El director ha querido preservar la esencia que convirtió a esta zarzuela en la gran joya de la obra de Jesús Guridi. Para ello, apenas se han hecho cambios en el guion, se ha respetado el vestuario de la época y se está trabajando exhaustivamente en el acento vasco de algunos personajes para asemejar la obra a la idea original. Además de retocar el vocabulario, “sin hacer cosas raras” y con el fin de hacerlo lo más entendible posible para los jóvenes.
“Lo que queremos es que la gente se divierta, que salga contenta y que salga con una actitud de fiesta”, aseguró Fernández, con la intención de que sea acorde a la que Bilbao vivirá esos días tan señalados. La obra, que cuenta con tres actos, tiene un carácter costumbrista vasco de principios de siglo muy definido en el que se desarrolla “una trama amorosa sentida y sencilla”.
La historia se desarrolla en la localidad imaginaria de Arrigorri y cuenta la vida de Santi, un hombre mayor que al volver de hacer fortuna en las Américas busca dar continuidad familiar a su caserío tratando de casar a sus dos sobrinos, Ana Mari, y Joshe Miguel. Ante la negativa al enlace de este último, Santi decide buscar una esposa para sí mismo, aunque aún no haya anunciado a la novia, haciendo que el joven Joshe Miguel, temeroso de perder su herencia trate de enamorar a las posibles pretendientes de su tío para así evitar el enlace matrimonial.
Mientras, Ana Mari, profundamente enamorada de Joshe Miguel pero consciente de que su amor no es correspondido, se ofrece como novia para su tío Santi, haciendo aflorar en Joshe Miguel un verdadero amor por su prima. A lo largo de toda la obra se entremezclan multitud de situaciones de carácter cómico, aligerando la carga emocional de la función.
La presentación de la zarzuela vasca tuvo lugar ayer en el propio Palacio Euskalduna, a la que acudieron el director escénico Humberto Fernández; Julia Guridi, hija del compositor alavés; Julio Morales, tenor que interpretará a Joshe Miguel, y un representante de Elai Alai. Allí Fernández se mostró honrado por poder realizar esta función en el Palacio Euskalduna y calificó la obra de Guridi como “la obra vasca por antonomasia.”.
La hija de Jesús Guridi, Julia Guridi, destacó la identidad vasca con la que su padre dotó a la obra y calificó El Caserío como una de sus obras de mayor relevancia: “Instrumentalmente es una de las obras más grandes de mi padre”.
Por su parte, el tenor Julio Morales habló de la importancia que tiene interpretar una obra de este calibre y con esta temática en Aste Nagusia: “Es una propuesta que impone mucho. Interpretar El Caserío, en plenas fiestas y en el Palacio Euskalduna te mueve todos los cimientos por la gran responsabilidad que conlleva”. Y a pesar de que alabó la belleza y la calidad de la obra, Morales admitió que es una producción muy difícil de interpretar, por sus numerosos matices : “El Caserío se puede interpretar de cualquier forma, pero como no lo hagas de la manera correcta, se te verá el plumero”.
Las funciones de zarzuela obtuvieron un gran éxito en pasado año, y se espera que en la edición de actual se obtengan resultados similares.