Bilbao - Una bolsa que el viento vuela y se pega al parabrisas de un turismo. La copa de una árbol muy ancha que tapa una señal de tráfico avisando de una curva peligrosa. Una arqueta obturada que ayuda a generar balsas de agua con riesgo para la circulación. Todas estas circunstancias pueden generar un accidente de tráfico.

Son situaciones de riesgo que la Diputación de Bizkaia evita cada año con un plan de mantenimiento de las cunetas y márgenes de la red viaria del territorio que suma algo más de 1.300 kilómetros. Una labor de conservación que implica una inversión superior a 10 millones de euros, solo en este apartado, sin contar las tareas de mantenimiento de asfaltado, iluminación y atención de sistemas inteligentes de la red viaria o el plan invernal, entre otras.

Un trabajo ingente que lleva a cabo el departamento de Desarrollo Económico y Territorial está dividido en cuatro áreas geográficas. En concreto, el área I cubre las comarcas de Mungialdea y Busturialdea; la II, Durangoaldea, Lea-Artibai, Arratia; la III, las zonas de Nerbioi/Zeberio, Enkarterri, Margen izquierda y zona minera (excepto vías rápidas) y la IV recoge todo el área metropolitana de Bilbao, donde operan las autovías y viales de gran capacidad.

La labor de conservación de limpieza y desbroces de las zonas tangenciales de las carreteras se efectúan de una forma preventiva en función de la época del año y de manera sistemática. Entre los meses de abril y octubre es cuando el trabajo se multiplica al crecer árboles, césped, arbustos y demás elementos vegetales. Los datos que arrojan el balance anual son espectaculares.

Así, las dos campañas que cada ejercicio se realizan para la limpieza de las márgenes de los viales implica actuar en 3.504 kilómetros lineales de cunetas. Una labor que llevan a cabo diversas cuadrillas de trabajo y cuyo coste para las arcas forales asciende cada año a 3,33 millones de euros. El desbroce de vegetación en los arcenes se efectúa dos veces al año a lo largo de 2.157 kilómetros y las podas de árboles limítrofes a la vía, cuyas copas excesivas pueden llegar a ser un riesgo para el tráfico, obligan a recorrer a los operarios forales 731 kilómetros de viales. Además cuando es necesario se procede a la tala total.

Otra labor que se lleva a cabo, y que no se nota más que cuando se deja de realizar, es el barrido de la calzada. Con un camión especial autopropulsado que dispone de cepillo y equipo de aspiración se asean dos veces al año más de 2.900 kilómetros de carreteras en las tres zonas que rodean el área metropolitana.

En esta última, el trabajo de limpieza se multiplica por seis, hasta 12 veces al año sumando algo más de 11.400 kilómetros de viales. Y eso sin contar los residuos que genera un accidente de tráfico. Hay que tener en cuenta el hecho de que la mayor parte del tráfico viario de Bizkaia pasa por la zona metropolitana y ello obliga a una labor de mantenimiento mucho más intensa. Otro elemento especial en este área es el tipo de viales. Decenas de kilómetros de autovías que requieren una atención de limpieza a elementos tan concretos como bermas, medianas, arquetas o colectores que tienen que estar expeditos en un territorio donde la lluvia puede causa problemas cuando cae torrencialmente.

Área metropolitana De hecho, el mayor volumen de trabajo a acometer por las brigadas en la zona metropolitana implica que el presupuesto foral sea mayor. En concreto, este año desembolsará para este área casi cinco millones de euros, casi la misma cantidad que las otras tres zonas de actuación juntas. En total, el departamento de Imanol Pradales prevé gastar este año 10,06 millones de euros en limpiezas y desbroces .

Un coste económico que solo se ve cuando, por cualquier razón, se deja de acometer esa labor de conservación y las cunetas se llenan de bolsas de plástico, restos de neumáticos y animales que perecen por causas naturales o golpeados por vehículos.

Aunque, según la última encuesta de Percepción de la calidad de la red viaria del pasado año, parece que los conductores sí son conscientes del aseado de la red viaria. De hecho, el indicador de limpieza es el más valorado entre las 3.000 personas preguntadas, con una nota de 8,96 sobre 10, bastante por encima de los 6,64 puntos que recibe el estado del pavimento, la valoración menos buena.