EL equipo de la Asociación Española de Futbolistas Amputados (AEFA) -formado por futbolistas de Andalucía, Asturias, Barcelona, Ceuta, Euskadi y Madrid-, afronta con optimismo su primera participación en el Torneo 6 Naciones que se disputará del 11 al 14 de septiembre en Varsovia, capital de Polonia, con la participación de Italia, Irlanda, Francia, Polonia y Turquía.
En ese camino, los catorce jugadores del combinado estatal -a las órdenes del entrenador catalán, Cristian Rodríguez-, han estado concentrados durante una semana en el albergue municipal de Kotorrio del municipio vizcaino de Abanto-Zierbena. “Ha sido una gran experiencia ya que nos ha permitido llevar a cabo entrenamientos continuados, mañana y tarde, de cara a preparar esta importante cita europea, y nos ha permitido afianzarnos como grupo en una convivencia en la que todos hemos colaborado en las diferentes tareas en el albergue”, reseña Rodríguez, quien como el resto de la roja agradece las facilidades dadas por el Ayuntamiento minero y por el C.D. Gallarta cediéndoles las instalaciones de manera gratuita.
No ha sido la única ocasión en la que este combinado de futbolistas recala en Abanto-Zierbena ya que, a finales de noviembre del año pasado, vinieron para preparar el partido que supuso el debut oficial del equipo ante la selección francesa, a la que derrotaron por 3-2.
Desde entonces hasta hoy, con la motivación, ilusión y espíritu de superación de estos deportistas por jugar al máximo nivel -han cosechado tres victorias, ante Francia y Polonia en dos ocasiones, un empate frente Italia, y una derrota contra Inglaterra- estos esforzados jugadores de fútbol para amputados o Onefoot-Ball -como a ellos les gusta llamarlo-, se aprestan a presentar sus avances físicos, técnicos, tácticos ante Europa en la cita polaca.
Una cita en la que la falta de dinero, al ser esta una asociación que aún no ha sido reconocida oficialmente por la Real Federación Española de Fútbol, a diferencia de las federaciones en otros países europeos o latinoamericanos, por lo que la falta de fondos y ayudas es una constante. Y este es precisamente el gran handicap con el que se encuentran estos deportistas, cuyo afán de superación es encomiable y un ejemplo para otras personas con su problemática física.
“Nosotros nos pagamos hasta los viajes para poder entrenar, y solo hay que fijarse en las procedencias de los jugadores para hacerse una idea del coste que nos supone juntarnos”, señala Mikel Balmaseda, el único jugador vasco de este combinado estatal que fía la financiación del campeonato de Polonia -unos 7.000 euros- a los propios recursos de los jugadores y a los de los tres patrocinadores privados que colaboran con ellos: Hummel, Ingeteam y Keep Walking.
“La AEFA no cuenta con ningún apoyo económico a nivel público por lo que las actividades o proyectos que se llevan a cabo son sufragados por sus miembros o por el apoyo a nivel privado como es el de nuestros patrocinadores. Para nosotros es fundamental contar con el apoyo de cualquier persona que financie nuestras actividades”. Para ello, AEFA ha abierto una cuenta bancaria en el Banco Santander, con el número de cuenta 0049 0034 04 2711653289, donde se pueden ingresar donaciones o hacerlas a través de Pay Pal.
REDES SOCIALES El germen de la AEFA se fraguó inicialmente a través de las redes sociales. Los jugadores contactaron con el fin de promover la creación de esta sociedad, que actualmente cuenta con más de veinte asociados, catorce de los cuales forman el equipo que acudirá a Polonia. La asociación estatal, integrada en la World Amputee Football Federation a través de la asociación europea, es una organización sin ánimo de lucro creada en el año 2014 y cuya meta principal es la integración social de las personas con discapacidad a través del deporte, concretamente el Fútbol. “Promover, fomentar y desarrollar la práctica del Fútbol en personas con discapacidad es nuestro principal objetivo para lo que estamos tramitando con las instituciones u organismos pertinentes el reconocimiento de esta modalidad deportiva como deporte federado, tanto a nivel autonómico, estatal e internacional”, apunta Mikel Balmaseda, quien destaca que igualmente asesoran y ayudan a personas con discapacidad, a sus familias, asociaciones y otros organismos interesados en la práctica de esta modalidad deportiva. “Además nuestra asociación tiene una clara labor social favoreciendo la integración social y el desarrollo de las capacidades a nivel físico, psicológico y social de las personas con discapacidad”, remarca Balmaseda quien tiene previsto iniciar contactos con empresas e instituciones vascas para “dar a conocer nuestros objetivos y recabar apoyos de cara a promover torneos en nuestra comunidad como ya se hace en otras partes del Estado”.
No en vano estos torneos, a falta del reconocimiento oficial como selección, son el único camino para que siga avanzando esta práctica deportiva cuya regla de oro es: Una pierna y una muleta. De momento los chicos de la roja han llegado hasta el Torneo de Polonia de fútbol 7 como asociación, tal vez en un futuro cercano lo puedan hacer como selección oficial.