Orduña reubica los servicios culturales en la Alhóndiga

Orduña - Primero fue el traslado de la oficina de turismo y próximamente se hará lo mismo con la ludoteca y el gaztegune. La emblemática Alhóndiga de Orduña -un céntrico edificio de estilo neoclásico que fue construido en el siglo XIX y rehabilitado en 2010- se está convirtiendo poco a poco en la idea para la que fue reformada: un moderno centro cívico para acoger las actividades y asociaciones culturales de la ciudad. Además de una gran sala de exposiciones, la planta baja del inmueble alberga desde finales de octubre el escaparate informativo y promocional de la ciudad.

Desde entonces, la oficina de turismo ocupa un espacio de cien metros cuadrados, cuatro veces más que la superficie que tenía en los anteriores locales de la Foru plaza lo que le permite ofrecer un mejor servicio y atención a la ciudadanía. La idea en este 2015 es “llevar las actividades de la planta baja y el segundo piso de la kultur etxea”, anuncia el Consistorio.

Su destino será la segunda planta de la Alhóndiga donde el Ayuntamiento tiene previsto acondicionar una zona de entrada y espacio común, una sala principal para diferentes actividades, dos salas polivalentes para cursos, reuniones y exposiciones, el gaztegune, la ludoteca, los salones de ensayo y la cocina para uso ocasional.

De manera paralela, el gobierno municipal trabaja en la redacción de la normativa de uso de estas instalaciones y para regular el acceso a los diferentes espacios con los que cuenta el edificio.

Hasta que llegue ese momento, el funcionamiento del complejo cultural será como hasta ahora y se seguirá dejando a las asociaciones locales utilizar las estancias del edificio para actividades puntuales realizando antes la correspondiente solicitud de reserva.