Bilbao - La reordenación de las líneas de Bizkaibus entró ayer en servicio con normalidad, según destacaron desde el Departamento de Obras Públicas y Transportes de la Diputación Foral de Bizkaia, excepto en el caso de la lanzadera entre Galdakao y el metro en Etxebarri, donde el Ayuntamiento impidió que los autobuses llegaran hasta la estación del suburbano. A lo largo de la jornada se pusieron en marcha una línea por cada una de las cinco nuevas concesionarias. En total, a lo largo del día tomaron parte en esta entrada en servicio de las nuevas líneas, 300 autobuses y 1.200 trabajadores de Bizkaibus.
Según informó la Diputación Foral, titular del servicio que ayer comenzó a operar con cinco empresas concesionarias, los problemas de la lanzadera se debieron a que la Policía Municipal de Etxebarri impidió a los autobuses recoger y dejar pasajeros junto a la estación del metro y les obligó a hacerlo a unos 200 metros de distancia. A pesar de ello, los autobuses encargados de realizar este servicio de lanzadera, continuaron funcionando durante toda la jornada pese a las limitaciones de recorrido impuestas por la Policía Municipal de Etxebarri.
Las mismas fuentes señalaron que la institución foral analizará hoy, lunes, la situación creada por la actuación de las autoridades del municipio de la comarca de Nervión-Ibaizabal. “Lo que ha pasado”, señalaron desde la Diputación, “ha sido una circunstancia ajena al servicio”.
Advertencia El alcalde de Etxebarri, Loren Oliva, ya anunció el pasado viernes que el Ayuntamiento había instado a la Diputación Foral de Bizkaia a trasladar las paradas de los autobuses de la lanzadera al principio de la calle Nervión, a unos tres o cinco minutos a pie de la estación del metro.
El Consistorio, con la aplicación de esa medida por parte de la Policía Municipal, apoyó de esta forma las demandas de la plataforma vecinal contra la imposición de la lanzadera creada en Etxebarri por un grupo de residentes.
Por su parte, el alcalde de Galdakao, Ibon Uribe, del PNV, hizo un llamamiento “a la solidaridad entre vecinos” para que este problema pueda resolverse. “Me corresponde lanzar un mensaje en tono conciliador, porque de lo contrario nos llevaría a un conflicto entre los dos municipios y no voy a ser el que incendie esa mecha. Quedarnos a rezar, no”, explicó en declaraciones a los medios el alcalde, quien recordó que la competencia sobre estos autobuses es de la Diputación Foral de Bizkaia.
Aparte de este hecho, el resto de las 89 rutas fueron operadas por las nuevas concesionarias con normalidad salvo “algún pequeño problema con el programa informático en alguna unidad”, según las mismas fuentes del Departamento Foral de Obras Públicas y Transportes.
Concesionarias Las nuevas empresas adjudicatarias, Pesa Lur, S.A., Ezkerraldea-Meatzaldea Bus, S.A., Busturialdea-Lea Artibai Bus S.A., Grupo Acha Movilidad Lujua Txorierri Mungialdea S.A. y Grupo Acha Movilidad Enkarterri S.A., prestarán servicio durante un plazo de 10 años y con un coste para las arcas públicas de Bizkaia de 79 millones de euros al año.
De las 89 líneas, 15 serán en Busturialdea-Lea-Artibai; 22 líneas en Ezkerraldea-Meazaldea; 8 en Enkarterri; 23 líneas en Txorierri-Mungialdea y 21 más en Nerbioi-Arratia-Durangaldea. A estas líneas se añadirán en 2015 otras nuevas y algunas mejoras en el servicio. La renovación de Bizkaibus incluye la puesta en funcionamiento de 65 nuevos autobuses, todos accesibles y con información a bordo para invidentes, que de forma paulatina incorporarán wifi gratuito para que los pasajeros puedan conectarse a internet. Además estarán dotados con monitores informativos, que ofrecerán un mapa de posición y el diagrama esquemático de la línea que se está recorriendo.
Por otra parte, la Diputación Foral de Bizkaia llevará a cabo desde hoy y hasta el próximo viernes, día 19, interrupciones puntuales en la BI-635, entre Amorebieta-Etxano y Muxika. Las afecciones se producirán en estas cinco jornadas en horario de 08.00 a 18.00 horas. - DEIA