BILBAO. Durante las seis primeras semanas, se procederá al vaciado total del edificio y se donará parte del mobiliario a ONG y asociaciones que lo habían solicitado, según ha informado la Diputación en un comunicado.
En esta primera etapa, también se llevará a cabo una inspección de los edificios colindantes para garantizar su seguridad y tranquilizar a los vecinos.
Tras esta fase inicial, comenzará el derribo total, que desde la Diputación prevén que se llevará a cabo de forma rápida.
La demolición de la antigua Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica de La Casilla dejará una superficie de unos 21.000 metros cuadrados, que serán destinados para servicios públicos de la Diputación cuando haya recursos económicos.