Bilbao. Solo los más veteranos de Basurto se acuerdan de cuando la calle Autonomía, llamada Gregorio Balparda en la época franquista, era una vía limpia de obstáculos visuales. Solo los que peinan canas saben cómo, colocándose en el punto más alto de esta calle, en su cruce con Luis Briñas, se podía contemplar la longitud de esta arteria urbana que delimita el Ensanche de Bilbao. A partir del próximo martes por la mañana, ese nuevo horizonte volverá a la retina de los que lo recuerdan y será descubierto por los más jóvenes. Y es que más de 40 años después de su construcción, los viaductos que sobrevolaban Autonomía serán definitivamente abatidos, dejando la calle despejada.
El grueso de la retirada de los dos tableros que se habían dejado por encima de la calle se ha efectuado en horario nocturno durante las tres últimas madrugadas. En cada trabajo nocturno, las empresas contratadas por la Diputación Foral para eliminar los antiguos accesos de Sabino Arana han procedido a retirar tres de la cuatro partes en que se dividieron los dos vanos solitarios.
El proceso de retirada ha seguido un guion idéntico al que se llevó a cabo para retirar los tableros ubicados en el tramo de Sabino Arana que va de Autonomía a Pintor Lekuona. Cada vano entre pilares se ha dividido en dos de forma longitudinal generándose en este caso cuatro piezas. La tercera fue abatida en la pasada madrugada del miércoles al jueves "sin problema alguno", indican fuentes forales. En esta tranquilidad mucho ha tenido que ver una de las grúas más grandes del mundo que se está utilizando para acometer esta tarea de forma rápida e intentando causar el menor número de problemas a los vecinos.
Ya solo queda por desmontar el último vano, maniobra que la Diputación ha previsto efectuar la madrugada del próximo martes. Para el final se ha dejado el tramo más complicado, porque "es el más alto, pesado e irregular de los cuatro que atravesaban esta calle", comentan desde la Diputación vizcaina. Una vez despejada en su integridad la calle Autonomía, se procederá a derribar los pilares sobre los que se apoyaban los dos tramos del viaducto. Mientras tanto, la espectacular grúa será llevada a su próxima zona de trabajo, entre las calles Pintor Lekuona y Novia Salcedo, para proseguir con desmontaje del viaducto restante.
