Bilbao. El barrio bilbaino de Sarriko acoge desde el pasado mes de junio un edificio con mucho talento por metro cuadrado. Se llama Bilbao BBK Talent y en su interior viven investigadores e investigadoras de "alta cualificación" que desarrollan su trabajo de forma temporal en centros y universidades del País Vasco. Eider Txarterina trata que su estancia en Bilbao sea lo más acogedora posible. "Intentamos", dice, "que tengan un aterrizaje amable en la ciudad y que al final Bilbao sea para ellos un referencia, no solo en el ámbito profesional".
¿Qué balance hace desde que se puso en marcha el centro?
Creo que es positivo, aunque todavía es muy pronto para hacer balance. Desde que se abrió, el 1 de junio, han pasado por el centro 38 personas. Y hay que tener en cuenta que agosto es un mes con muy poca actividad en todos los sectores.
Actualmente, ¿cuántos residentes tienen?
Tenemos 24 personas instaladas en 17 apartamentos. Eso significa que estamos en algo más de la mitad de la máxima ocupación.
¿Qué capacidad tiene el centro?
Cuenta con 32 apartamentos, pero podría crecer si fuera necesario.
¿Las perspectivas son buenas?
Sí. En estos momentos ya tenemos reservas para los próximos meses y visos de que habrá más entradas.
¿Cuál es el perfil de las personas que han utilizado hasta el momento el Bilbao BBK Talent?
El perfil es el de más hombres que mujeres, con edades comprendidas entre los treinta y los cincuenta, aunque ha habido alguna excepción, el de una persona que superaba los sesenta.
¿Todos extranjeros?
No. Aunque hasta ahora hemos tenido a personas de 18 nacionalidades, la mayor parte de los residentes son españoles. De todas formas, hay que decir que, aunque tienen nacionalidad española, muchos de ellos provienen directamente de Estados Unidos u otros países de Europa, porque ya se sabe que los investigadores andan por medio mundo.
¿Cómo surgió la idea de crear Bilbao BBK Talent?
La idea se enmarca dentro de la estrategia de atracción del talento que las instituciones vizcainas llevan realizando desde hace tiempo. En esa estrategia figura el desarrollo de los centros de investigación y docentes que se inició hace una década. Posteriormente se vio que eran necesarios unos servicios administrativos y operativos, que los puso en marcha la Diputación Foral a través de Bizkaia:Xede - hoy Bizkaia:Talent- pero faltaba una parte de acogida social.
Ahí es cuando se diseña el programa Bilbao BBK Talent.
Sí. Las instituciones vieron que estaba cubierta la parte profesional y operativa pero faltaba un lugar, una casa que pudiera acoger a los investigadores que venían de fuera de Bizkaia. Ante ello, la BBK, como promotor principal, y con la ayuda de otros agentes, decide poner en marcha la casa.
¿Y en qué consiste el programa que usted dirige?
En que estas personas que llegan a nuestro territorio tengan un aterrizaje amable, nos conozcan, se sientan como en casa y que Bilbao sea para ellos una referencia, no solo en el ámbito profesional. En definitiva, que Bilbao sea un antes y un después en su vida.
¿Cómo lo van a hacer?
Hablando con la gente e intentando solucionar sus problemas por muy pequeños que sean. En nuestro protocolo de bienvenida realizamos una entrevista con cada una de las personas que llegan para identificar las necesidades que puedan tener en el ámbito social.
¿Qué tipo de necesidades plantean?
Hay de todo. Desde una persona que quiere información sobre instalaciones deportivas para practicar deporte hasta otra que se interesa por los servicios médicos porque está embarazada.
¿Les sorprende esa bienvenida?
Sí, mucho, porque no se lo esperan. Les sorprende que alguien les pregunte de manera individual si necesitan ayuda. Nosotros no somos asistentes personales, pero sí intentamos que Bilbao sea un lugar amable para ellos y que nuestra sociedad sea acogedora con ese talento investigador.
¿Qué actividades realizan para que ese aterrizaje en la ciudad sea más amable?
Hemos hecho visitas guiadas por Bilbao. También hemos ido a Artxanda y al Casco Viejo a tomar algo. Ahora estamos pendientes de poner en marcha nuevos proyectos con agentes importantes de la ciudad en el ámbito de la gastronomía y la cultura.
Usted que ha tratado con ellos, ¿los residentes extranjeros conocían algo sobre Bilbao antes de venir a la capital vizcaina ?
Pues sí. Eso me ha sorprendido bastante. La mayor parte de la gente sabe dónde viene. Tienen conocimiento de Bilbao, sobre todo, como ejemplo de transformación de ciudad, y luego, el tema de la gastronomía es muy conocido y deseado por ellos. De ahí que vayamos a tener actividades relacionadas con la gastronomía.
¿Ha habido algún problema de convivencia en el centro?
Ninguno. Todo lo contrario. Cuando uno vive fuera de casa, la gente que está cerca de ti se convierte en tu familia. La actitud de las personas que llegan al Bilbao BBK Talent es muy positiva. Hay que tener en cuenta que antes de estar en Bilbao han vivido en muchas partes del mundo.
¿Qué condición deben cumplir las personas que quieran residir en el centro?
Deben ser investigadores o investigadoras de alta cualificación. Eso significa que tienen un doctorado o en camino de conseguirlo o tienen becas de relevancia internacional.
¿Cómo son los apartamentos?
Son todos iguales. Tienen 50 metros cuadrados. Disponen de un salón, una cocina americana, un baño y una habitación de doble uso.
¿El precio?
El precio de cada apartamento es de 590 euros al mes. En el precio se incluyen todos los gastos como agua y luz. La estancia máxima es de un año y la mínima, 15 días.
¿Cuál es el objetivo del programa Bilbao BBK Talent?
Además de facilitar la estancia y la acogida, queremos que sea un lugar para el intercambio del conocimiento en los espacios de ocio. Que surjan relaciones profesionales.