Berango. El gazteleku de Berango está de celebración. El lugar de encuentro para los jóvenes del municipio cumple diez años en los que "ha ofrecido una oferta de actividades de ocio, muchas de las cuales han ido encaminadas a fortalecer valores como la solidaridad, la igualdad y la potenciación del uso del euskera cuando disfrutan de su tiempo de ocio", resalta la concejal de Cultura, Izaskun Zubiaur.

Por ejemplo, actualmente hay 26 jóvenes que acuden cada fin de semana al aula de Santa Ana, donde organizan las Berango Gauak, además de partidas de rol, bailes, sesiones musicales y fiestas, entre otras actividades. "Se trata de reforzar el trabajo en equipo o el compañerismo y fomentar las relaciones sociales, entre otras cuestiones", comenta Zubiaur.

Uno de los valores en los que más hincapié se ha hecho es el de la solidaridad, que tuvo su momento más importante cuando, hace tres años, se organizaron una serie de actividades anuales de ayuda humanitaria a Guatemala. Todo ello acabó con la guinda de un viaje organizado a aquel país. "Entonces acudían 40 jóvenes aproximadamente, pero aquella experiencia ha servido para que todos sigan involucrados y preocupados por la solidaridad actualmente", indica Zubiaur.

Aquella fue una actividad puntual, pero cada año los adolescentes toman parte activa en otras acciones que sirven para recaudar fondos destinados a proyectos humanitarios, como es el caso de la feria del libro usado. "Es que es fundamental conseguir que estos chavales se involucren en las actividades del pueblo y hasta colaboren con otros colectivos para que sean parte activa de la vida social y cultural de Berango", recalca la responsable de Cultura.

Euskera e igualdad El fomento del euskera es otro de los objetivos que se persigue en el gazteleku. Así, entre otras muchas iniciativas, los jóvenes berangotarras han mostrado su apoyo activo al idioma en eventos como el Ibilaldia, Kilometroak o el Euskararen Eguna.

"Otro aspecto importante que se tiene en cuenta en el gazteleku, así como en la ludoteca y el ludokluba es trabajar por la igualdad", apunta la concejal. "A parte de que se organizan talleres especiales de malos tratos o relaciones basadas en el respeto entre jóvenes de diferentes sexos, tanto chicas como chicos se reparten equitativamente tareas de limpieza", añade. Por todo ello, "el balance final de estos diez años es muy positivo".